• Esta conducta compulsiva viene de la parte infantil aterrada, ante algo que supuestamente amenaza nuestra vida o un aspecto importante de ésta.
• La mayoría de nosotros somos “control freaks”, de una manera u otra. Porque simplemente para esta parte emocional y mental infantil, es demasiado peligroso pensar o sentir que no tenemos control sobre las cosas.
Nuestras estrategias de control, son creativas y sutiles.
• Manipulamos
• Usamos el poder (imponemos)
• Amenazamos
• Seducimos
• Convencemos
• Engañamos
• Usamos la culpa
• Rescatamos
El intento de control crea conflicto, expectativas no alcanzadas, mala comunicación, juegos de poder y mucho dolor.
En palabras de Melody Beatty en el libro No más Codependencia:
• No somos la gente que “hace que las cosas sucedan”. Desde el control, nos volvemos personas que consistentemente con gran esfuerzo y pérdida de energía, intentamos forzar las cosas para que sucedan.
• Controlamos en nombre del amor
• Controlamos porque “solo quiero ayudar”
• Controlamos porque sabemos mejor como están las cosas
• Controlamos porque nosotros tenemos la razón y ellos están mal
• Controlamos porque tenemos miedo de no hacerlo
• Controlamos porque no sabemos qué otra cosa hacer
• Controlamos porque pensamos que tenemos que hacerlo
• Controlamos porque no pensamos
• Controlamos porque control es todo lo que conocemos
Y al final, controlamos porque es la forma en que siempre aprendimos a hacer las cosas
Tiranos y dominantes, algunos gobiernan con mano de hierro desde un trono que se auto asignaron. Son poderosos. Son los que saben más y las cosas tienen que ser hechas a su manera. Y se encargarán de ello.
Otros llevan a cabo esta sucia tarea en secreto. Se esconden detrás de un disfraz de dulzura y amabilidad y secretamente se ocupan de los asuntos, pero los asuntos de otros.
Otros más, llorando y suspirando, se quejan de incapacidades, proclaman su dependencia, anuncian su ser víctimas en cada acto y exitosamente controlan a través de esta falsa debilidad. Son taaaan débiles, necesitan tanto que les ayuden. Algunas veces los “débiles” son los controladores y manipuladores más poderosos. Han aprendido a mover los hilos de la culpa y la lástima.
Otros combinan técnicas.
Pero sea cual sea la técnica, el objetivo es el mismo:
• Hacer que otras personas hagan lo que tú quieres que hagan. Que se comporten como quieres que se comporten. Que crean lo que tú quieres que crean.
• Forzar los eventos de la vida para que develen en la manera y en el momento en que ellos desean. No permitir que ocurra lo que está sucediendo o lo que no está sucediendo.
• No soltar, pase lo que pase.
• Hemos escrito el guion y nos encargaremos que los actores se conduzcan y las escenas sucedan exactamente como hemos decidido que tiene que ser.
EJEMPLO: Mujer con esposo alcohólico y mujeriego.
Nos estamos engañando:
• La vida no puede ser controlada y entre más intentamos controlarla, más nos controlan.
• Cuando intentamos controlas a otras personas, somos controlados.
• Y frecuentemente acabamos perdiendo el control de nuestras vidas.
El control es una ilusión. No funciona.
• No podemos controlar a otros, no podemos controlar (y no es nuestro asunto hacerlo) sus pensamientos, sus conductas, sus sentimientos o sus elecciones.
• No podemos controlar la vida, con trabajo nos controlamos a nosotros.
• Al final las personas harán lo que deseen hacer, sentirán lo que sea que sienten y pensarán lo que quieran pensar.
• Harán las cosas que ellos creen que necesitan hacer. Y cambiarán solo cuando estén listos para cambiar.
• No importa si ellos están equivocados y nosotros tenemos la razón.
• No importa si se están lastimando, no importa si los pudiéramos ayudar si solo nos escucharan, si solo cooperarán con nosotros.
NO IMPORTA, NO IMPORTA, NO IMPORTA, NO IMPORTA.
Pregunta:
¿Si no estuviéramos intentando controlar a alguien o algo, qué estaríamos haciendo diferente?
LET GO AND LET GOD. Suelta
• Necesitamos soltar, desapegarnos, desatarnos de esta situación y hacernos a un lado.
• No tienes que dejar de amar al otro, o que ya no te importe.
• No tienes que tolerar abuso, simplemente tienes que poner tus manitos en tus propios bolsillos y dejar a la gente y a la vida en paz.
• Para soltar el control necesitamos girar la atención de afuera hacia adentro y empezar a responsabilizarnos de todas esas necesidades esenciales no satisfechas que intentamos a través del control, satisfacer por medio personas o eventos externos.
• Cuando intentamos controlar algo o a alguien, detrás hay necesidades no satisfechas y miedo de no poderlas satisfacer.
• Como hemos dicho muchas veces, la confianza empieza en nosotros: confiar en nuestros sentimientos, nuestra intuición, y las percepciones y señales de nuestro cuerpo. Para aprender a confiar, necesitamos crecer emocionalmente y dejar de llevarnos por las emociones de nuestra parte infantil.
Una vez logrado esto, podemos entonces enfocar nuestra atención en crear confianza en las relaciones que tenemos.
PREGUNTAS (del libro “No más Codependencia” de Melody Beattie)
1. ¿Hay alguien o algún evento en tu vida que estás tratando de controlar? ¿Porque? Escribe sobre esto.
2. ¿De qué formas (mental-física-emocional, etc.) estás siendo controlado/a por eso que tú estás intentando controlar?
3. ¿Qué pasaría (a ti y a la otra persona) si te apartaras de esta situación o persona? ¿pasaría de todos modos a pesar de tus intentos de control?
4. ¿Cómo te beneficias en este intento de controlar la situación? ¿Cómo se beneficia la otra persona por tus intentos de control?
5. ¿Qué tan efectivos son tus intentos de controlar?
