La tasa interanual de la inflación en el conjunto de la OCDE continuó en enero su aumento ininterrumpido desde hace más de un año para llegar al 7,2 %, que constituye el máximo desde febrero de 1991.
El principal motivo de esa evolución fue de nuevo la energía, que se encareció entre enero de 2021 y enero de este año un 26,2 %, cinco décimas más que la subida anual constatada en diciembre, explicó este jueves en un comunicado la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).