El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, informó hoy que consultará al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) sobre una vía para aprobar el presupuesto fiscal de su Gobierno para 2017 sin necesidad de ser sometido a la discusión del Parlamento, declarado en desacato.
«Yo necesito que el presupuesto de 2017 sea viabilizado (viable), aprobado y que nada se detenga», dijo el presidente venezolano a través de una cadena obligatoria de radio y televisión al firmar la carta en la que pide la opinión del máximo tribunal para arrogarse la autoridad para aprobar el presupuesto público.
El mandatario toma esta vía luego de que el pasado 5 de septiembre el TSJ declarara la nulidad de los actos de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), controlado por los opositores, por el desconocimiento de una sentencia anterior.
«La AN está fuera de legalidad, de la constitucionalidad, y todas sus decisiones son nulas, y yo necesito que el TSJ me diga qué hacer con el presupuesto de la nación», indicó.
El jefe de Estado venezolano aseguró que, pese a que la Constitución atribuye esa facultad solo al Parlamento, él puede «decretar su aprobación» en el marco del decreto de estado de excepción y emergencia económica que rige en el país y que le otorga «facultades extraordinarias».
El Supremo declaró la nulidad de los actos legislativos luego de que la AN desconoció una sentencia en la que ordenaba la suspensión de la proclamación de cuatro diputados (tres opositores y un chavista) como medida cautelar a una investigación por supuestas irregularidades en su elección.
La junta directiva de la AN, sin embargo, decidió juramentar a los tres diputados opositores de la representación indígena.
Desde entonces el TSJ ha declarado nulos, inconstitucionales, o inaplicables casi todos los instrumentos que se han aprobado en el pleno.
