Una organización nacional de protección de aves que se opone a la construcción de una turbina eólica a lo largo del lago Erie dice que presentará una demanda para bloquear el proyecto si la Guardia Nacional Aérea de Ohio no cancela sus planes.
La Conservación Estadounidense de Aves califica al proyecto de 1,5 millones de dólares en Camp Perry como «ilegal y mal planificado», reportó el The (Toledo) Blade (http://bit.ly/2dOVdBq ).
La organización se opone porque la fundación de la turbina fue instalada antes de que el Servicio de Vida Silvestre y Marina opinara sobre los efectos potenciales de la turbina en las aves y murciélagos; alegan que se gastó 200.000 dólares del erario público sin autorización.
Los observadores de pájaros dicen que la turbina de 198 pies (60 metros) estaría en medio de importantes rutas migratorias. Ya había una turbina de 325 pies (100 metros) al lado del lago Erie, y los observadores de pájaros temen que el proyecto pudiera abrir la puerta para máquinas más grandes en la ribera.
«Es una de las áreas más delicadas en Estados Unidos», dijo Michael Hutchins, director de la campaña de energía eólica. «Hasta una sola turbina en el lugar equivocado puede tener un efecto destructivo».
Stephanie Beougher, portavoz de la Guardia Nacional de Ohio, dijo que el servicio de vida silvestre, la Guardia Nacional y la Fuerza Aérea estaban analizando una evaluación ambiental.
El proyecto pretende producir más energía de recursos renovables, conforme con las directrices presidenciales, dijo Beougher en un comunicado.
La organización de conservación se alió con el Observatorio de Aves Black Swamp, de Ohio, para presentar la demanda.
