La campaña de la candidata presidencial demócrata Hillary Clinton gastó el mes pasado 645 mil dólares más al día que la de su oponente republicano, Donald Trump.
Pese al gasto, que suma unos 50 millones de dólares, Clinton no ha logrado avanzar más en las encuestas.
De acuerdo con el promedio de encuestas nacionales que realiza Real Clear Politics, la ex Primera Dama lidera la contienda por 1.1 puntos, pues tiene el 45 por ciento de las preferencias sobre el 43.0 de Trump.
Agosto fue el mes en que más gastó la campaña de Clinton, superando su mes más caro anterior por 12 millones de dólares.
Juntando lo recaudado por la campaña de Clinton y por el Partido Nacional Demócrata, los demócratas gastaron en total 78 millones de dólares en agosto, mientras que la campaña de Trump y el Comité Nacional Republicano gastaron alrededor de 47 millones de dólares.
La brecha podría explicarse por lo diferentes que son sus campañas.
Clinton tiene una campaña tradicional, que se centra en la compra de anuncios por valor de varios millones de dólares y en expandir su base de votantes.
Trump, en tanto, gasta menos al gozar de una aparente cobertura mediática ilimitada y al dejar el contacto con sus votantes en manos del Partido Republicano.
La diferencia de gastos entre ambos también es un motivo de orgullo de Trump.
«Nuestros gastos en publicidad, en personal, en todo, son una pequeña fracción (que lo que gasta Clinton), y aún así estamos muy cerca (en las encuestas)», se jactó Trump en un mitin en Kenansville, en Carolina del Norte.
Hace cuatro años, el Presidente Barack Obama y el nominado republicano, Mitt Romney, recaudó y gastó cada uno alrededor de mil millones de dólares, un número formidable que el director nacional de finanzas de Clinton estableció como un punto de referencia.
Gran parte del gasto de Clinton se debe a los anuncios, que le cuesta unos 10 millones de dólares a la semana.
En agosto, Clinton llenó 11 estados con 35 mil 714 anuncios televisivos contra 7 mil 457 de Trump en sólo cinco estados, de acuerdo con los datos de Kantar Media.
Clinton asimismo formó un sólido grupo de campaña de 800 empleados que le cuestan en total unos 5 millones de dólares mensuales.
Trump, en tanto, tiene un grupo de unas 130 personas y 100 consultores.
El mayor gasto de la campaña de Trump durante agosto fue un pago por unos 11 millones de dólares para Giles-Parscale por sus servicios de consultoría digital y publicidad online. Como Trump, la firma es nueva en la política.
