La violencia es considerada por los jóvenes como una de las principales razones para desencadenar un conflicto en una pareja , afirmó la doctora Tania Rodríguez Salazar, investigadora del Departamento de Estudios de la Comunicación Social del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), quien dio a conocer los resultados de su “Encuesta sobre la representación del amor y la pareja en jóvenes de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG)”, durante su participación en Contingente 3.0. Congreso de Comunicación Pública en el núcleo Belenes del mismo plantel.
El estudio muestra que las acciones que ocasionan daño físico o emocional son consideradas, por el 40.1 por ciento de las mujeres y el 37.6 de los hombres jóvenes, como una de las principales razones para desencadenar un conflicto en una pareja.
La académica abarcó para su estudio una muestra de 800 personas, de la cual 51 por ciento son mujeres y el resto varones. La encuesta fue realizada durante 2014 y se darán a conocer los resultados de manera formal en un libro que será publicado este año.
Durante su participación en el panel “Género, jóvenes y diversidad”, la académica especificó que otras razones que se consideran importantes para desencadenar un conflicto en una relación de pareja es la infidelidad, para el 26.7 por ciento de las mujeres; promesas incumplidas, para 21.5; y los celos, el 18.3. Mientras que en el caso de los varones, los celos fueron validados como causa por 29.4; la infidelidad, 23.7 y la desconfianza hacia ellos, el 20.6.
“Los resultados del estudio revelan que los varones toleran menos los celos de las mujeres y ellas le dan más importancia a la infidelidad, seguida por las promesas incumplidas de los hombres”.
En apariencia, la mayoría de los jóvenes, de ambos sexos, muestran apertura hacia la unión libre o hacia el amor múltiple, pero cuando les preguntan qué es lo que desean para ellos, manifiestan que quieren parejas fieles, únicas, monogámicas y exclusivas.
Las mujeres protagonizan una mayor defensa de la institución de la monogamia y en consecuencia, el rechazo a las parejas abiertas o múltiples. “Sus posiciones morales provienen de haber interiorizado posturas patriarcales que adscriben a la mujer la responsabilidad de mantener a la pareja y dar todo lo necesario para evitar las infidelidades y la ruptura”.
El disgusto de los varones es más frecuente cuando sancionan la infidelidad de las mujeres que de los hombres, señaló la académica de la Universidad de Guadalajara (UdeG).
Las mujeres son también las que más desaprueban diversas clases de violencia, como la presión para tener relaciones sexuales, burlarse de la pareja, los chantajes y las amenazas. No obstante, ni hombres ni mujeres encabezan una actitud de rechazo hacia el hecho de que los hombres no participen en las labores domésticas.
En el panel “Género, jóvenes y diversidad”, de Contingente 3.0, la doctora Candelaria Ochoa Ávalos, diputada federal por el Distrito 9 de Jalisco, de Movimiento Ciudadano, invitó a los jóvenes a ser cada día más incorrectos políticamente y no seguir ideologías que marcan desigualdades entre los géneros.
Expresó que la libertad es amenazada por grupos que dicen estar en contra de la ideología de género y se declaran a favor de la familia, pero lo que promueven es lo contrario. “Ese discurso lo que en realidad hace es atentar contra diferentes formas de familia que deben ser respetadas”.
Por su parte, la doctora Zeyda Rodríguez Morales, investigadora del CUCSH, expresó que los que satanizan la ideología de género, en realidad también defienden su propia idea de lo que es el género, ya que sostienen puntos de vista sobre cómo deben ser hombres y mujeres, así como la relación amorosa, el matrimonio y la familia.
