Los perros recuerdan sin problemas la ubicación de los cuencos en los que comen, y a veces recuerdan los comandos que les damos para que ejecuten un truco. De otros, se sabe que han recorrido grandes distancias recordando el camino que les llevaba a la casa de su amo. Pero ¿hasta cuánto tiempo pueden almacenar recuerdos en su cabeza? En Live Science se han hecho esta misma pregunta, y seguramente la respuesta te haga decir “guau”.
Una experta consultada por esa web cree que los perros guardan sus recuerdos más o menos tiempo dependiendo de la utilidad que tengan desde un punto de vista evolutivo.
Podríamos pensar que la mayoría de los perros del mundo son mascotas y viven en el hogar de su amo, pero lo cierto es que el 75% de los perros del planeta no viven en casas humanas sino que vagan libremente. Para ellos, según Monica Udell (profesora de ciencias animales en la Universidad Estatal de Oregón) un recuerdo que ayude a los perros a sobresalir en la búsqueda de comida puede ayudarles a sobrevivir.
Por ejemplo, la comprensión de las tareas básicas de desplazamiento -saber que algo todavía está allí aunque no sea visible- puede ayudar a los perros “busca-vidas”.
Udell pone un ejemplo: “Si un perro observa que alguien pasa al lado de una papelera y tira una hamburguesa dentro, tal vez no la vea más pero puede recordar que allí había una hamburguesa, y podrá buscarla en el último lugar donde la vio”.
Cuando hay alimentos involucrados los perros pueden tener excelentes memorias de trabajo, una especie de bloc de notas donde permanecen “escritos” los recuerdos a corto plazo. Además, los perros utilizan recuerdos a largo plazo para ayudarles a acordarse de algunos trucos, como rodar sobre si mismos cuando se les manda. Es posible que con el tiempo, los perros que hayan forjado estrechos vínculos con los seres humanos (es decir, que hayan respondido a sus comandos de voz) se beneficiaran y luego vivieran para transmitir sus genes.
Los perros también pueden tener recuerdos episódicos. Estos son como recuerdos a largo plazo, pero son más complejos ya que requieren de autoconciencia. (No está claro si los perros son conscientes de sí mismos, por lo que para ellos, estos recuerdos se llaman recuerdos “episódicos”). Los recuerdos episódicos suelen ser autobiográficos y están ligados a detalles del tipo “qué”, “cuándo” y “dónde”.
Algunos perros mostraron recuerdos episódicos en un estudio de 2016 publicado en la revista Current Biology. En aquel estudio se enseñó a diecisiete perros a imitar a los seres humanos en un paradigma del tipo “haz como yo” y luego échate. Por ejemplo, si el humano golpeaba una botella, el perro también lo haría antes de acostarse.
Después de una de estas tareas, y una vez que el perro se hubiese echado, un humano realizaba una acción adicional, como tocar un paraguas, mientras que daba un comando desconocido. Luego, el humano llevaba al perro detrás de una pantalla, y esperaba entre un minuto y una hora antes de pedir al perro que “lo hiciera” (véase vídeo bajo estas líneas).
Algunos perros fueron capaces de recordar y realizar la imitación en ambos puntos de tiempo, aunque los investigadores descubrieron que el rendimiento de la mayoría de los perros disminuyó a medida que crecía el tiempo transcurrido entre el momento de ver la acción y que se les pidiese que la imitasen. El hallazgo sugiere que los perros pueden codificar recuerdos no relacionados con los comandos, y luego pueden incorporarlos con órdenes posteriores, siempre y cuando la orden se dé dentro de aproximadamente una hora.
Los perros pueden guardar las cosas en su memoria durante mucho tiempo”, afirma Udell. “Pero lo que recuerdan y cuánto tiempo pueden recordarlo tiene mucho que ver con el contexto“. Por ejemplo, si su dueño se va en una misión militar, los perros pueden recordarlo años más tarde, lo que sugiere que los lazos dueño-perro son importantes para ellos.
Pero si les preguntas: “¿Dónde está la pelota?” podrían olvidarlo en pocos minutos.
Así pues, en opinión de Udell: “la duración de un recuerdo codificado en el cerebro de un perro tiene que ver con el contexto y también con la prominencia e importancia de las cosas que fueron codificadas”.
