La Corte Suprema de Justicia de Nicaragua informó este martes que los 135 ciudadanos liberados la semana pasada por el gobierno de Daniel Ortega, perdieron su nacionalidad.
El viernes pasado 135 nicaragüenses arribaron en un vuelo a Guatemala, luego de que el presidente Ortega los liberara tras negociaciones con Estados Unidos.
«Estados Unidos agradece el liderazgo y la generosidad del Gobierno de Guatemala por aceptar amablemente a estos ciudadanos nicaragüenses. Una vez en Guatemala, a estas personas se les ofrecerá la oportunidad de solicitar formas legales de reconstruir sus vidas en Estados Unidos u otros países», indicó el asesor de Seguridad Nacional de la Presidencia de Estados Unidos, Jake Sullivan.
Además, consideró que nadie debería ser encarcelado por ejercer pacíficamente sus derechos fundamentales a la libertad de expresión, asociación y práctica de su religión.
Entre las 135 personas hay 13 integrantes de la ONG Mountain Gateway, con sede en Texas, así como laicos católicos, estudiantes y otros que el Gobierno de Nicaragua considera una amenaza.
Por su parte, la justicia de Nicaragua aseguró que los liberados incitaron y promovieron “la violencia, el odio, el terrorismo y la desestabilización económica, alterando la paz, seguridad y el orden constitucional”. Por lo que se dispuso además el decomiso de todos los bienes de los liberados para, según la resolución, responder por los daños materiales e inmateriales ocasionados con sus acciones.
Seis nicaragüenses liberados piden asilo a Guatemala
Al menos seis nicaragüenses expresaron su interés de pedir formalmente refugio en Guatemala, informó el secretario de Comunicación Social de la Presidencia, Santiago Palomo.
Detalló que los extranjeros tienen 90 días de permiso para permanecer en Guatemala y están alojados en diferentes hoteles.
Por otro lado, el subsecretario de Estado adjunto para América Central de Estados Unidos, Eric Jacobstein, dijo que hasta el momento ninguno de los liberados ha ingresado a Estados Unidos, y reiteró que pueden solicitar el ingreso al programa de admisión de refugiados.
“Estamos proporcionando alimentos, alojamiento, asistencia médica, asistencia psicosocial. La idea es que estén en Guatemala por un período de tiempo tan corto como sea posible mientras están postulando por varias vías legales”, agregó Jacobstein en conferencia virtual.