A pesar de las “señales apocalípticas” que algunos analistas ven en las relaciones México-Estados Unidos, el dinero se sigue moviendo fácilmente de un país a otro en economías globalizadas. México sigue siendo un mercado atractivo para la inversión y el peso es la octava moneda más fuerte del mundo: aunque es un mercado seguro, los capitales internacionales “ya no se mueven tanto hacia Estados Unidos” y buscan otras opciones que también sean rentables, afirmó el consultor financiero Juan Carlos Rubio Mendívil.
Advirtió que por desconocimiento de los mecanismos de operación y de sus ventajas, los empresarios mexicanos no aprovechan los instrumentos financieros del Mercado de Derivados (MexDer), un mercado que anualmente maneja más de un billón de pesos en operaciones de futuros y opciones de compra-venta de diferentes productos.
Rubio Mendívil sustentó una conferencia sobre la “Administración Financiera en Épocas de Volatilidad e Incertidumbre”, ante el Grupo Guadalajara del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), y señaló que uno de los principales commodities que se operan en los mercados internacionales de futuros es el petróleo, debido precisamente a la inestabilidad de sus precios.
Subrayó luego que la zona metropolitana de Guadalajara tiene una intensa actividad comercial, con altos volúmenes de importaciones y exportaciones, en donde los empresarios deben conocer a fondo los alcances de seguridad y protección que garantizan el Mercado de Derivados y los contratos de futuros, una creación de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), a fin de evitar las costosas repercusiones de la volatilidad.
El consultor financiero, presidente de Kuali Derivados y quien fue gerente de Finanzas Corporativas de la Casa de Bolsa InverMéxico, dijo a los ejecutivos de finanzas que las tasas de interés que se manejan en operaciones de compra-venta de derechos son más competitivas que las que se manejan en los bancos, pues se trata de “coberturas de garantía para evitar la volatilidad”.
La reunión fue coordinada por el Presidente del Grupo Guadalajara del IMEF, Juan Carlos Sáinz del Toro, quien reconoció que la caída del comercio exterior afecta más a las economías emergentes, como México, pues los ajustes en los flujos comerciales mantendrán la tendencia a la baja, por lo que las empresas deben adoptar coberturas de protección.
Durante su documentada exposición, Rubio Mendívil afirmó que el peso mexicano es la octava moneda más fuerte del mundo y los capitales suelen moverse a las economías en donde pagan más rendimientos. Insistió en la necesidad de proteger las operaciones de las empresas, pues las diferencias entre tener coberturas y carecer de ellas, “son impresionantes”. Se pueden realizar operaciones de cobertura en el MexDer desde 10,000 dólares, lo que resulta accesible para pequeños y medianos negocios.
