El sector energético mexicano cierra este 2020 con un conflicto recargado por las políticas del presidente, Andrés Manuel López Obrador, para «rescatar» a las empresas del Estado y apagar la participación de los privados.
«Si ya estábamos viendo ciertas acciones y regulaciones nuevas, ciertos cambios regulatorios en pro de las actividades de las empresas productivas del Estado, este año fue algo mucho más directo», comenta este martes a Efe la economista Daniela Flores, de la consultora Talanza Energy.