La bancada de los Diputados Ciudadanos presentó hoy una iniciativa de adiciones al artículo 20 de la Ley Reglamentaria del artículo 27 de la Constitución para poner en marcha una serie de medidas y acciones encaminadas a contener los riesgos a la salud de la población ligados a instalaciones, equipos y materiales nucleares.
La diputada Dennisse Hauffen presentó la propuesta que tiene el propósito de asegurar el funcionamiento correcto de las inspecciones, auditorías y verificaciones de las instalaciones nucleares y radioactivas en el país, así como un adecuado manejo de los desechos, por medio de una comisión integrada por científicos, instituciones de gobierno y educación superior, las secretarías de Salud y Medio Ambiente, la sociedad civil y autoridades municipales.
“La Ley Reglamentaria del Artículo 27 de la Constitución, aprobada en 1985, hizo posible la creación de procedimientos relativos a las instalaciones nucleares y el manejo de los materiales radioactivos que por unos años funcionaron, pero hoy día es evidente la existencia de vacíos y cabos sueltos en la evaluación, supervisión, almacenamiento y manejo de los desechos y residuos radiactivos”, dijo la legisladora del Estado de México.
Como ejemplo de esta situación citó el Centro de Almacenamiento de Desechos Radiactivos (CADER), situado a 75 kilómetros de la Ciudad de México, en la carretera Tizayuca Otumba, Santa María Maquixco, municipio de Temascalapa, en el Estado de México, que inició operaciones en 1970; se estima que tiene almacenados 2000 m3 de desechos radiactivos y 5700 fuentes radiactivas en desuso.
Explicó que el centro de almacenamiento se instaló de forma temporal y en 1992 la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguarda (CNSNS) confirmó que no era idóneo para ser utilizado de forma permanente. Mencionó que en 1999 tras visitar el Cader, un grupo de diputados obtuvo de las autoridades la promesa de que el centro sería reubicado, cosa que nunca ocurrió. Diez años más tarde se le pidió al gobernador Enrique Peña intervenir para que el depósito fuera removido y tampoco sucedió nada.
“En días pasados realicé una gira de trabajo por municipios del Estado de México como Temascalapa, donde conocí casos de enfermedades degenerativas como cáncer, leucemia, deficiencia renal, muertes prematuras y malformaciones que representan un gran impacto en la salud y medio ambiente como la infertilidad de la tierra, encarcelamientos y despojo de tierras”.
Expuso que a nivel federal se ha desatendido la reubicación del depósito nuclear y a nivel local son desatendidas las peticiones para que se practiquen estudios a la población para determinar si los habitantes de estas comunidades han sido afectados por el funcionamiento del tiradero nuclear.
