Una de las virtudes de las autoridades electorales es su autonomía, por lo que debilitarlas podría reflejar una regresión autoritaria, señaló el consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), Jaime Rivera.
Al participar en el primer día de actividades del Encuentro Nacional para una Reforma Político-Electoral del Estado Mexicano, que organiza la Universidad Autónoma de Querétaro y la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales, destacó que uno de los pilares de la democracia es la formación y el funcionamiento de las instituciones electorales autónomas.
“Su imparcialidad pasa por su autonomía y por el respaldo de un amplio consenso de todos los competidores, y este es uno de los elementos que no deberían ponerse en duda, y mucho menos deberían sufrir debilitamiento que se traduzca en una regresión autoritaria”, aseveró.
El consejero electoral expuso que México ha transitado a la democracia mediante la construcción de instituciones, y no de la sola voluntad de algunos actores políticos ni de un solo líder, pues ha sido una construcción institucional que ha pasado por amplios consensos.
Agregó que los cambios se permitieron gracias a las reformas que contaron con el respaldo de diversos actores políticos, es decir, con las fuerzas políticas más representativas que en su momento fueron mayorías, pero también con las minorías, “algunas que después se convirtieron en mayoría. Así es el juego democrático”.
“Reconocer esa construcción institucional y que en democracia nadie gana todo de una vez y para siempre, sino que las mayorías y las minorías son temporales, circunstanciales y en una contienda democrática, así como nadie gana todo, nadie pierde todo; por lo menos ninguna fuerza política debe quedar totalmente excluida”.
Jaime Rivera destacó que el nombre del encuentro, “Para una Reforma Político-Electoral del Estado Mexicano”, obliga a una reflexión seria, ya que el desenvolvimiento de una nueva reforma podría determinar mucho del porvenir de la democracia mexicana; recordó que se habla de las opciones de cambio en el sistema electoral, en el sistema de gobierno y en las oportunidades de participación.
“Es una discusión que debe tener en el centro el reconocimiento de la construcción institucional que se ha desarrollado durante al menos tres décadas, que ha permitido que México se instale entre las naciones democráticas del mundo”.
Añadió que actualmente se puede cambiar al gobierno conforme a la voluntad de la ciudadanía, además de existir gobiernos sometidos al equilibrio de poderes y contrapesos de organismos constitucionales autónomos y expresiones de la sociedad civil organizada.
