El Partido Acción Nacional (PAN) manifestó su rechazo a la derogación de la reforma educativa por considerar que «se trata de un retroceso en materia educativa en contra de la niñez mexicana, especialmente de los más pobres».
El presidente nacional de este instituto político, Marko Cortés Mendoza, opinó que con esta medida que incluye la desaparición del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), el gobierno federal “quiere dar un salto al pasado”.
Refirió que el INEE ha servido en estos años para comenzar la medición de los educadores del país y poder tener parámetros respecto del eventual avance o retroceso en la calidad educativa.
“¿Por qué el Presidente no refuerza las tareas del INEE, en lugar de crear uno de buenas intenciones, pero sin métodos que pueden generar resultados?”, cuestionó el dirigente panista.
Señaló que de concretarse esta medida, los principales afectados serán los niños, pues no contarán con un organismo que mida imparcialmente la calidad de sus maestros y no se tomen medidas al respecto.
Cortés Mendoza aseveró que la evaluación docente, «es la única herramienta con la que contamos para conocer el avance y alcance que tienen los profesores y alumnos».
Sabemos, abundó, que la reforma educativa es perfectible, sin embargo no podemos perder de vista que ésta constituyó un avance importante, que puso en el centro de la discusión a los niños y jóvenes de este país.
