Houston paraíso de los olvidadizos
Por: Guillermo E. Quiroga Madrigal
Comienzan a relucir los “trapitos al sol” de los funcionarios de primer nivel en el Gobierno de México, entorno a sus declaraciones patrimoniales en las cuales por lo menos dos mintieron. Se trata de la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero y el Secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, en investigación por el Grupo Reforma.
En menos de una semana Grupo Reforma publicó el pasado 6 de febrero que la titular de la Secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero omitió un pequeño detallito al ocultar en su declaración patrimonial que posee desde 2009 un penthouse en Houston, el cual tiene un valor actual superior al medio millón de dólares, que equivale a unos 11.1 millones de pesos.
La ex ministra es propietaria, junto con su esposo, del departamento 2203 de la torre Park Square en Houston, ubicada en una zona exclusiva de la ciudad, según información de Reforma.
El penthouse se encuentra en el piso 22, cuenta con una extensión de 269.7 metros cuadrados y está valuado en 583 mil 646 dólares, unos 11.1 millones de pesos mexicanos, de acuerdo con los avalúos oficiales.
Sin embargo ante la investigación del Grupo Reforma, de inmediato la señalada lo desmintió argumentando o echándole la bolita a la Secretaría de la Función Pública, el porqué se reservó la información del Penthouse si ella dijo que se publicara.
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, declaró que se pudo comprar el penthouse con ayuda de su marido, debido a que ella y él tienen 50 años trabajando cada uno.
«¿Cómo lo justifico? Pues lo pagamos mi esposo y yo. Yo lo tengo hace 10 años y lo compramos con nuestro trabajo. Que quede claro: Tenemos 100 años trabajando. 50 yo y 50 él», dijo al diario Reforma, que reveló la información.
Por su parte la titular de la Función Pública, Irma Sandoval le reviró: “En este caso ella tenía que hacer una nota informativa de puño y letra de la información que quiera compartir de su declaración privada”.
Ante tal situación, bastaron un par de días para que ya apareciera en su declaración patrimonial el penthouse de Sánchez Cordero, un detallito faltante de 11 millones de pesos.
Pero quien siguió los pasos de la Secretaria de Gobernación, fue el mismísimo flamante Secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, quien posee desde el 2016 un condominio de unos 6.6 millones de pesos en la ciudad de Houston, que no aparece en su declaración patrimonial, revela investigación del Grupo Reforma este lunes 11 de febrero.
En su declaración del pasado 26 de diciembre disponible en DeclaraNet, Jiménez Espriú accedió a hacer públicos sus datos patrimoniales, pero no declaró poseer un bien inmueble a su nombre, otro grave error de un funcionario de primer nivel del gabinete del presidente López Obrador.
A diferencia de la semana pasada, cuando el presidente López Obrador en su tradicional conferencia de prensa matutina y acompañado de Sánchez Cordero le dio todo su respaldo, durante su conferencia matutina de este lunes, a pregunta expresa de un reportero sobre la falta de declaración de este bien inmueble, el mandatario mexicano aseguró que el funcionario “tiene que explicar sobre esta situación”.
“Es muy aleccionador, de como con transparencia se evitan simulaciones. Y si no existen simulaciones se aclaran las cosas. Se tiene el derecho a la réplica y esto es la democracia. Hoy tiene que responder el secretario sobre este tema”. Apuntó el presidente sin darle el respaldo de tener a su lado a su secretario.
Al parecer algunos secretarios del gabinete de López Obrador se resisten a las medidas impuestas por el presidente o definitivamente no captan bien las señales que manda. No cabe duda que López Obrador tendrá que ser más enérgico con sus funcionarios de primer nivel, esos que son de sus confianzas, por lo menos dos, ya le metieron un par de cuadrangulares (home run), uno Cordero Sánchez y otro Jiménez Espriú. Cuántos funcionarios más habrá que estén a punto de conectarle un cuadrangular por omitir ese tipo de “detallitos” o definitivamente el presidente se fajará y comenzará por cepillar de su gabinete a esos olvidadizos… Seguimos en este Reloj de Arena.
