La oficial Administración Nacional de la Atmósfera y los Océanos (NOAA) de los Estados Unidos redujo hoy de manera considerable su pronóstico de huracanes para la temporada actual y dijo que se espera la formación de hasta siete huracanes.
El pronóstico actualizado de la agencia estadunidense proyecta ahora de nueve a 13 tormentas, de cuatro a siete huracanes y entre 0 y 2 de categoria tres o mayores.
El pronóstico incluye las cuatro tormentas atlánticas que se han formado en lo que va del año: la tormenta subtropical Alberto que se formó en mayo, seguida por los huracanes Beryl y Chris y la tornenta subtropical Debby que se formó a principios de esta semana.
Antes del comienzo de la temporada de huracanes, los expertos de la NOAA esperaban de diez a 16 tormentas, cinco a nueve huracanes y un máximo de cuatro huracanes fuertes con vientos de más de 174 kilómetros por hora.
“El pronóstico intermedio de este año parece mucho menos preocupante”, dijo el científico Gerry Bell de la NOAA.
Los científicos argumentaron para su pronóstico más benévolo, temperaturas más bajas del mar en el Atlántico, patrones de vientos que suprimen las tormentas y aguas más cálidas en el Océano Pacífico que generan un ambiente hostil para los huracanes en el Atlántico, Caribe y Golfo de México.
Bell no se confia tanto, al señalar que si bien el fenómeno de El Niño no se ha formado a estas alturas sobre el Pacífico, las probabilidades de que ello ocurra aumentaron al doble y ese patrón que aumenta la temperatura del agua en el Pacífico crea vientos favorables para las tormentas atlánticas.
El año pasado fue brutal para el Atlántico con la formación de diez huracanes seguidos en el Atlántico, la devastación de Puerto Rico y otras islas del Caribe debido a María, mientras que Irma barrió en los Cayos de Florida y Harvey devastó Texas.
