El corredor C.J. Anderson llegó a la zona de diagonales corriendo 48 yardas cuando restaban 12:32 minutos del tiempo extra y dio a los Broncos de Denver una victoria por 30-24 sobre los Patriots de Nueva Inglaterra, quienes vieron rota su racha de 10 triunfos consecutivos y pierden su calidad de invicto.
En duelo de equipos líderes de división, los Broncos (9-2) sumaron dos triunfos seguidos y se afianzan líderes en la del Oeste de la Conferencia Americana (AFC).
Mientras que los Patriots (10-1), que llevaban marcha perfecta perdieron el invicto y dejan a los Panthers de Carolina (11-0) como único equipo que no ha conocido la derrota en lo que va de temporada.
Los Panthers derrotaron a domicilio 14-33 a los Cowboys de Dallas, el jueves, en el inicio de la décimo segunda semana de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL).
El mariscal de campo de los Broncos, el reserva Brock Osweiler, completó 23 de 42 pases para 270 yardas con un envío de touchdown, el que permitió a su equipo forzar la prórroga a falta de 1:09 segundos para el final del tiempo reglamentario, y uno interceptado, que bajó a 72,5 el índice de pasador.
Los Patriots perdieron con su mariscal de campo estelar Tom Brady, quien completó 23 de 42 pases para 280 yardas con tres envíos de touchdown, lo le hicieron interceptaciones, fue derribado tres veces y dejo en 99,3 el índice de pasador.
El equipo de Nueva Inglaterra estaba al frente del marcador 7-21 al inicio del cuarto periodo, pero su defensa no pudo aguantar la presión del ataque terrestre de los Broncos que al final se llevaron la victoria a pesar de la ausencia del mariscal estelar Peyton Manning, que fue baja por lesión.
Osweiler, el reserva, no había sido factor en los tres primeros cuartos del partido, pero dejó lo mejor para la recta final cuando se convirtió en el héroe del triunfo junto con Anderson que fue el que hizo la anotación decisiva y final.
El partido, que se disputó en el Sports Authority Field at Mile High, de Denver se dio en medio una nevada, que cubrió las líneas del terreno de juego, que tuvieron que ser limpiadas periódicamente por el personal de mantenimiento.
