Tocilizumab es un fármaco que trata alteraciones en el sistema inmunológico, que aún no ha sido aprobado para uso contra COVID-19, pero sus estudios iniciales apuntan a buenos resultados.
De acuerdo con el American College of Rheumatology, el tocilizumab (RoActemra) es un medicamento biológico aprobado para tratar la artritis reumatoide (AR) en adultos, la artritis reumatoide juvenil (ARJ) poliarticular, y la forma sistémica de la artritis idiopática juvenil (AIJ) en niños.
Cabe señalar que los medicamentos biológicos son artificiales y se fabrican por medio de técnicas de ingeniería genética y están estrechamente relacionados con una proteína que el cuerpo produce naturalmente. Se las utiliza para suprimir el sistema inmunitario en las enfermedades autoinmunitarias y para tratar la inflamación.
El Tocilizumab ha mostrado efectividad para tratar el COVID-19 (Foto: EFE/CJ GUNTHER)
Hay muchas vías que se pueden bloquear para evitar que la inflamación dañe las articulaciones. El Tocilizumab bloquea el receptor de interleucina (IL)-6 para detener la producción de inflamación en el cuerpo. Este medicamento se inyecta cada una o dos semanas o se realiza una infusión en el cuerpo por vía intravenosa todos los meses.
El tocilizumab no debe administrarse con otro medicamento biológico.
Durante la administración de tocilizumab se utilizarán análisis de sangre para controlar los aumentos en el colesterol o las enzimas hepáticas y las reducciones en los valores de los glóbulos blancos.
La presencia de fiebre u otros síntomas de infección, así como de cualquier otro dolor abdominal significativo, se deben informar de inmediato al médico de cabecera o al reumatólogo.