Todo paciente que vaya a ser sometido a una cirugía debe bañarse previamente, la zona donde se realice la incisión no debe ser depilada, y los antibióticos deben administrarse antes de la operación no después, según unas nuevas directrices para evitar infecciones en el quirófano publicadas hoy por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Las Directrices Mundiales para la Prevención de las Infecciones Quirúrgicas son un nuevo compendio de normas que substituyen todo lo sugerido anteriormente y que están basadas en evidencias científicas, según explicaron expertos de la OMS en teleconferencia.
Elaboradas por veinte expertos, establecen 29 recomendaciones específicas sobre cómo evitar infecciones en el quirófano.
Una de las principales sugerencias es obtener una óptima higiene corporal, pero evitar depilar o afeitar la zona donde se vaya a realizar la operación, una práctica muy expandida.
“Afeitar es totalmente desaconsejado en todo momento, sea en el preoperatorio o en el quirófano”, rezan las directrices, que añaden que si no hay más remedio que depilar para poder operar, el proceso se lleve a cabo con una máquina de cortar el cabello y no con una cuchilla.
“Tras una intensa revisión de las evidencias, se ha llegado a la conclusión de que no hay un beneficio claro en depilar”, subrayó Ed Kelley, director de departamento de Seguridad de la OMS, quien explicó que los micro-cortes que eventualmente se pueden hacer son posibles nuevos focos de infección.