De las mujeres con cáncer de mama que habitan en países con altos ingresos económicos, entre 70 y 80 por ciento son diagnosticadas en las etapas uno y dos, lo que incrementa considerablemente sus posibilidades de supervivencia.
En cambio, en los países con bajos ingresos económicos el porcentaje de casos diagnosticados en etapas tempranas disminuye, al ser de entre 20 y 50 por ciento, dio a conocer la oncóloga Diana Fabiola Flores Díaz, durante la “Jornada de cáncer de mama”, en el Instituto Nacional de Cancerología.
Ejemplo de ello es que mientras en México 51 por ciento de los casos se diagnostican en etapas uno y dos, en Estados Unidos el porcentaje es de 76 por ciento y en Nueva Zelanda de 67 por ciento.
La especialista evidenció la falta de equidad en México en materia de acceso a los servicios médicos en función del nivel socioeconómico, y para probarlo reveló que de los mil 473 mastógrafos que hay, casi 600 son propiedad de instituciones privadas, y los que pertenecen a las públicas se concentran en las grandes ciudades.
“Es más fácil que una paciente con ingresos altos se haga una mastografía y Papanicolaou que una paciente en pobreza”, indicó.
Agregó que no es suficiente practicar la mastografía, sino que debe acompañarse de una interpretación de calidad a cargo de radiólogos certificados en mama que únicamente son 445 para todo el país.