La Asociación Mexicana de Parques Acuáticos y Balnearios (Ampab) solicitará a las secretarías de Salud y de Turismo la instalación de una Mesa Informativa para que se conozca, una vez superada la emergencia sanitaria, los plazos para la reapertura de los mil 120 centros recreativos que existen en el país, para garantizar seguridad al visitante y cerrarle “el paso al miedo”.
El presidente de la Ampab, Gerardo Gallo Casas, dijo que estudian “una campaña de reactivación turística” para el sector con más de 10 millones de visitantes e ingresos por mil 485 millones de pesos.
Expuso que de los parques acuáticos, balnearios y parques naturales dependen más de 17 mil empleos directos y 50 mil indirectos, y “se reinventarán para migrar con esta nueva forma de vida tras el COVID-19”.
Reconoció que la Semana Santa, para el sector, “ha sido muy triste y oscura, de mucha tristeza y con un nudo en la garganta ante la ausencia y movimiento, risas y alegría en este tipo de centros recreativos”.
Señaló que debido a que las reglas de convivencia cambiaron con esta pandemia “ahora no solo habrá nuevas estrategias de marketing, sino hasta de concientización social sobre temas de salud”.
Gallo Casas detalló que las campañas ya se están procesando y el objetivo es ir un paso adelante en lo económico y en lo social, para que una vez que termine la cuarentena las personas tengan la confianza de salir y saber que “somos espacios seguros”.
Por ello, en un comunicado, reiteró que una vez superada la emergencia “las personas van a necesitar una distracción, pues han estado encerrados mucho tiempo, hay un ambiente de depresión y los parques justamente somos esos amortiguadores para apoyar a las personas… para la sana recreación”.
Finalmente, Gallo Casas anunció que no se descartan las alianzas entre este sector y los gobiernos de los estados, para impulsar que las personas acuden a estos parques de distracción en los próximos meses.
