La violencia contra los niños en zonas de conflicto alcanzó niveles históricos en 2024, según un informe de la ONU, que denuncia un incremento alarmante en las violaciones y ataques contra menores en diferentes regiones del mundo. Desde Gaza hasta Haití, pasando por la República Democrática del Congo y Colombia, el documento revela cifras que reflejan una situación crítica y de grave preocupación internacional.
El informe anual de la ONU verifica un total de 41,370 violaciones graves contra niños en 2024, lo que representa la cifra más alta registrada en casi 30 años de seguimiento. De estas, 36,221 ocurrieron durante el mismo año, mientras que 5,149 corresponden a violaciones anteriores confirmadas en 2024. La cantidad de menores afectados por múltiples formas de violencia ascendió a 22,495, y se reportan más de 4,500 niños asesinados y más de 7,000 heridos en contextos de hostilidades y ataques indiscriminados.
El documento señala que los territorios palestinos ocupan la primera posición en la lista de violaciones graves, con más de 8,500 incidentes, en su mayoría atribuidos a las fuerzas israelíes durante el conflicto en Gaza y otras áreas. La ONU confirma la muerte de 1,259 niños palestinos en Gaza, aunque las cifras aún están en proceso de verificación para el total de víctimas en 2024, en medio de la escalada bélica tras el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023. Además, se registran daños y víctimas en operaciones militares en Líbano y otros territorios.
En África, la República Democrática del Congo reporta más de 4,000 violaciones graves, Somalia supera las 2,500, Nigeria se acerca a las 2,500 y Haití experimenta un aumento del 490% en violaciones contra menores en un año. En este último país, las pandillas como «Viv Ansanm» (Vivir Juntos) han sido añadidas a la «lista de la vergüenza» de la ONU por reclutamiento, asesinatos y violaciones colectivas, en medio de un escenario de violencia extrema que llevó a la renuncia del primer ministro en primavera de 2024.
Por su parte, en Colombia, el Clan del Golfo y otras bandas criminales están acusadas de reclutar niños, en un contexto donde el reclutamiento forzado ha aumentado significativamente, con 450 casos en 2024, frente a 262 en 2023. La situación en Ucrania también es destacada, con un aumento del 105% en violaciones graves por parte del ejército ruso en comparación con el año anterior, además de la participación de las fuerzas armadas en Sudán y sus paramilitares en un conflicto que ya dura más de dos años.
La ONU advierte que estos datos deben servir como una “señal de alarma” y subraya que “estamos en un punto de no retorno”. El informe incluye en su «lista de la vergüenza» a actores responsables de violaciones a los derechos de los menores, en un esfuerzo por visibilizar y presionar por acciones concretas para detener esta tendencia devastadora.
