México espera que el plan de estímulo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, beneficie de forma indirecta a la débil economía mexicana e impulse el T-MEC, aunque también se pronostican choques con la nueva Administración estadounidense por la política energética, medioambiental y laboral.
El mismo presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, celebró la intención de Biden de inyectar 1,9 billones de dólares al mercado interno, puesto que, a su juicio, «eso va a ayudar mucho en la reactivación de la economía interna» de México.