Las autoridades marroquíes están fletando autobuses gratis para que los emigrantes devueltos desde Ceuta o aquellos que no lograron acceder los pasados días a la ciudad puedan regresar a sus domicilios, mientras que la calma es la tónica dominante en la localidad norteña marroquí de Castillejos tras la crisis migratoria de los pasados días.
El movimiento de retorno comenzó ayer, miércoles, y tiene dos modalidades: viajes en autobuses urbanos para quienes van a las poblaciones vecinas de la región (Tánger, Tetuán o Rincón) y viajes en autocares mejor equipados para quienes cubren distancias más largas, como Fez o Casablanca, distantes a varias horas, según informaron a Efe fuentes en el terreno.