Inicio ESTILO DE VIDA Marihuanódromo: el lugar que busca concentrar a los fumadores de la yerba

Marihuanódromo: el lugar que busca concentrar a los fumadores de la yerba

273
0

Autódromo, velódromo, hipódromo y hasta aeródromo son palabras comunes que refieren a amplios lugares donde se practican determinados deportes, pero el alcalde de la localidad colombiana de Tuluá pretende incluir en la jerga popular una similar que no aparece en los diccionarios: el “marihuanódromo”, un lugar donde en vez de un deporte, se practicaría un vicio.

Para nadie es un secreto que Colombia se ha identificado a nivel mundial como un país productor y consumidor de droga y en medio de un proceso de implementación de acuerdos con las FARC y la apertura de diálogos con el ELN (la segunda guerrilla mas importante del país), está claro que la preocupación política se centra en saber quién ocupará la cadena de distribución que dejan estos grupos que, por más de medio siglo, operaron al margen de la ley.

Jóvenes en cualquier lugar de Colombia, rondan los parques y esquinas dejando a su paso una estela de humo que aunque afecta el convivir ciudadano, es parte de esa dosis mínima de marihuana permitida. Aunque Funcionarios del Observatorio de Drogas de Colombia (ODC) –perteneciente al Ministerio de Justicia y del Derecho- presentaron un informe que concluye que de 2013 a hoy se han reportado 23 nuevas sustancias psicoactivas, la realidad demuestra que la marihuana es la más consumida en el país, seguida de la cocaína, el basuco y el éxtasis.

Del total de consumidores de drogas ilícitas en el último año, el 87% consumió marihuana. La dosis personal legalmente permitida, es de 20 gramos, según lo establece la ley 30 de 1.986. “Dosis para uso personal: Es la cantidad de estupefacientes que una persona porta o conserva para su propio consumo”, dice el exequible por la Corte Constitucional, Sentencia C-221 de 1.994.

Esta regulación, se ha convertido en un dolor de cabeza para muchos funcionarios, ya que de un lado, es permitida la dosis mínima, pero del otro, el nuevo código de policía, establece multas y penalidades para quienes consuman sustancias en lugares públicos:

Consumir sustancias alcohólicas o sicoactivas en el espacio público o en lugares privados abiertos al público generaría una multa de 8 salarios mínimos diarios ($183.848 pesos colombianos) y la disolución de la actividad.

Es por eso que el llamado “Marihuanódromo”, es la solución para el alcalde de Tuluá, Gustavo Adolfo Vélez, quien propuso la creación de un lugar que concentre a los consumidores y los mantenga alejados de parques y avenidas.

Tuluá es un reconocido municipio del centro del país, cuya propuesta por parte de su mandatario, tuvo resonancia a nivel nacional, para algunos, una idea descabellada y para otros, un reto que llegaría de la mano con propuestas de diferentes dependencias gubernamentales que ayuden a la rehabilitación de muchos de los consumidores. El Alcalde, en sus redes sociales, aseguró que la iniciativa surgió de la misma comunidad:

El mandatario de esta localidad enfatizó que el “Marihuanódromo” es hasta ahora una idea que se debe madurar pero que sin duda ayudaría a evitar situaciones de violencia generadas por el consumo de drogas.

Comments

comments

Artículo anteriorVicente Fox, en lista de ‘héroes’ de 2017: prensa europea
Artículo siguienteGabinete de Gobernabilidad y Seguridad comparece en Glosa Legislativa