Las variaciones en el clima están estrechamente vinculadas a la violencia humana en todo el mundo, de acuerdo a un nuevo estudio publicado por la Universidad de California en Berkeley y la Universidad de Princeton.
La investigación, que fue publicada en Science, examinó 60 estudios previos de todas las principales regiones del mundo. Los resultados sugieren que fenómenos como la sequía, las inundaciones y las altas temperaturas se correlacionan fuertemente con los puntos en conflicto.
Los investigadores señalaron ejemplos, incluyendo el aumento de la violencia doméstica en la India y Australia, los asaltos y los asesinatos en Estados Unidos y Tanzania, la violencia étnica en Europa y Asia del Sur, las invasiones de tierras en Brasil, la violencia policial en los Países Bajos y los conflictos civiles en los trópicos.
El mayor culpable: las temperaturas altas. De las 27 sociedades modernas estudiadas, todas mostraron una relación positiva entre el aumento de las temperaturas y la violencia.
«Encontramos que una desviación estándar hacia las condiciones más cálidas, que hacen que la probabilidad de violencia aumente un 4% y el conflicto intergrupal un 14%», dijo en un comunicado Marshall Burke, coautor principal del estudio.
Si los cálculos del estudio son correctos, un aumento de la temperatura global a 2 grados centígrados podría aumentar los conflictos entre grupos (como las guerras civiles) en más del 50%. La organización Climate Central estima que las temperaturas harán ese salto en 2040.
«A menudo pensamos en la sociedad moderna como independiente del medio ambiente, debido a los avances tecnológicos», dice el coautor Edward Miguel. «Sin embargo, nuestros hallazgos cuestionan esa idea».
Los investigadores se apresuraron a agregar que el clima es sólo una parte de la causa de conflictos violentos, y señalaron que hay muchos factores que contribuyen que son profundamente complejos. Sin embargo determinar por qué el clima contribuye es una cuestión urgente para la investigación futura.
Burke escribió que espera que los resultados «arrojen nueva luz sobre cómo el clima futuro forme a las sociedades humanas».
