En medio del escándalo por la revelación que hizo el periodista Carlos Loret de Mola sobre las cinco casas que la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, compró en nueve años y un terreno que el gobierno le habría regalado mientras era académica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). La polémica senadora Lilly Téllez salió a defender la libertad de expresión en México.
Por medio de su cuenta Twitter, la funcionaria calificó de “ricos de closet, rojillos de pantalla se queman en fuego amigo”. Esto luego de que el medio Latinus publicara un comunicado en el que defiende el derecho que tienen a la libertad de expresión.
Téllez, finalizó su post con la siguiente frase:
No permitiremos que linchen periodistas en su batalla.
Y es que desde que se difundió el reportaje sobre la Familia Sandoval-Ackerman. Tanto ellos, funcionarios y usuarios en general arremetieron contra el portal y el medio que encabeza Loret de Mola expresando la solidaridad hacia la secretaria del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, sobre el tema, el medio aseguró que nadie había desmentido la información proporcionada y documentada por el reportaje. Además, sobre la acusación de ser un grupo de interés, se destacó que es un medio ajeno a grupos políticos y que tiene claros su derechos.
Por otro lado, destacó que seguirá ejerciendo su labor de periodismo e investigación “a pesar de los intentos de intimidación y las categorizaciones propias de sistemas autoritarios que consideran una amenaza al periodismo y la crítica”.
Del mismo modo, destacó que permitirán el derecho de réplica a cualquier persona involucrada en el tema con el objetivo de abrir un diálogo entre la plataforma informativa y los funcionarios implicados.
El tema que generó la polémica para la familia Sandoval-Ackerman comenzó con el reportaje que revelaba que Eréndira Sandoval recibió como regalo un terreno de 253 metros cuadrados al sur de la capital que hoy está valuado en seis millones de pesos.
Además, se encontró que la pareja cuenta con otras cinco propiedades adquiridas en tan solo nueve años, cuando ambos se desempeñaban como académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Todas ellas fueron pagadas de contado.
En total, el patrimonio de la pareja ascendería a los 60 millones de pesos, de acuerdo con el actual mercado de valuación.
Ante esto, John Ackerman, esposo de la funcionaria y periodista mexicano, aseguró en sus redes sociales que tomaría acciones legales en contra de quienes realizaron el reportaje ya que es ilegal dar a conocer la dirección y apariencia de los domicilios de que poseen.
Negó que como académicos recibieran un salario de 28 mil pesos y destacó que las casas que poseía con su pareja habían sido fruto de trabajo duro y algunas donaciones por parte de sus padres.
