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Israel – Palestina: postear por postear

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Por: Pablo Quiroz Zepeda

@PabloQZepeda

Cada año desde el 2006 y casi de manera anual con pocas excepciones entre las acciones beligerantes de Israel y Hamas hasta nuestros días, vemos cómo las redes sociales se inundan de percepciones, malinterpretaciones, y sobre todo, de un contenido muy limitado de lo que sucede entre israelíes y palestinos. La polarización se vuelve muy tajante y poco acertada al replicar contenidos que no alcanzan a reflejar la realidad generando situaciones de odio para un lado u otro.

Sin embargo, estimadas y estimados lectores, sirva esta opinión de un servidor para proponer en este como en cualquier otro tema internacional que dejemos de postear por postear, que conozcamos no una, ni las dos caras de la moneda, sino todas las aristas y contextos existentes, las confrontaciones y los diálogos, los cambios políticos, sociales y económicos involucrados. Con ello, quizás ya podremos tener el suficiente criterio para dar un punto de vista en nuestras redes sociales favoritas.

Todos coludos, todos rabones

¿Cuántas veces hemos visto la típica imagen del medio de comunicación cubriendo al rival “a su conveniencia”? – Bueno, lamento decirle, estimada y estimado lector que ni para uno ni para el otro cabe la imparcialidad. Es decir, vamos conociendo la realidad de los mensajes y tendencias:

“A favor del lado israelí”:

Si bien es cierto que Israel tiene el legítimo derecho de defender a su territorio y a sus ciudadanos del grupo terrorista Hamas ante miles de misiles que se han lanzado de manos de sus milicianos, es de gravedad que no se señalen errores que se han cometido por medio de sus fuerzas de seguridad, y más aún, estropeando cualquier avance diplomático con países musulmanes y no musulmanes, poniendo en la cuerda floja a los recientes Acuerdos de Abraham y países que han decidido reconocer a Jerusalén como la capital del país, desechando cualquier intento absurdo de negar la vinculación histórica al pueblo judío con esa ciudad. Recientemente, Israel lanzó un ataque contra objetivos de Hamas, los cuales (con toda malicia) se encontraban en un edificio residencial donde también se encontraban oficinas de medios de comunicación reconocidos a nivel internacional como Al Jazeera y la agencia estadounidense AP, siendo para muchas organizaciones dentro y fuera de Israel una clara amenaza y agresión contra el periodismo y la seguridad para ejercer esta profesión y derecho.

Otra omisión de quien pueda estar completamente a favor de Israel es el no reconocer que por derecho internacional no se puede desalojar y construir en territorios palestinos, en particular de Cisjordania. Si bien Israel tuvo una paradójica respuesta en Gaza, al aplicar su política de “tierra por paz” no puede generar una decisión contraria del otro lado de Palestina. El derecho internacional es claro y va más allá de una ambición religiosa. En ello, es donde recae tanto el caso del desalojo del barrio Sheikh Jarrah como de una lista de terrenos enclavados en Cisjordania que no tendrían que estar ahí; sin embargo, el daño ya está hecho y otra política de “tierra por paz” difícilmente la veríamos.

Protesta en apoyo del pueblo palestino en Santiago de Chile, Agencia EFE Mayo, 2021.

“Quienes se jactan de ser pro palestinos”

De lo que más se quejan quienes se autodenominan como “pro palestinos” es de la imagen del mainstream media que supuestamente apoya a la causa israelí, pero no a la palestina. Dato curioso es que existen mayores publicaciones y seguimiento por parte de medios de comunicación a nivel internacional y de su audiencia acerca de Cisjordania y Gaza que otros asuntos sumamente atroces en la actualidad, donde literalmente es un “David contra Goliat”, y los antes mencionados no replican ni demandan justicia. Son poblaciones musulmanas las marginadas, confinadas en verdadero apartheid, doctrinadas, violadas y hasta asesinadas de manera sistemática en claros intentos de limpieza étnica que no gozan de las mismas condiciones de árabes israelíes o palestinos. – Dígame usted ¿cuántas veces ha visto publicar en redes sociales a los que se jactan de ser “pro palestinos” acerca del pueblo kurdo en persecución del gobierno de Turquía, de los rohingya en Birmania (más con la nueva junta militar después del coup d’etat) , o de los uigur quienes son llevados a campos de concentración en China?-

Algo muy común también de quienes se jactan de ser “pro palestinos” es el nulo conocimiento de la situación desde los conceptos más fundamentales y orígenes del conflicto. Por ejemplo, la definición, contexto y actores del grupo terrorista Hamas que argumenta cínicamente y con claro apego al antisemitismo, lo siguiente: «Israel existirá y continuará existiendo hasta que el islam lo destruya, tal como ha borrado a otros antes». Y continúan sus estatutos con el siguiente artículo: «No vendrá el Día del Juicio hasta que los musulmanes combatan a los judíos. Hasta que los judíos se escondan tras las montañas y los árboles, los cuales gritarán: “¡Oh, musulmán! Un judío se esconde detrás mío, ¡ven y mátalo!». De igual manera la “satanización” de la palabra sionismo, sin saber de dónde proviene y las diversas vertientes que tiene ( ¿a cuál referirse? ¿al religioso de los colonos en Cisjordania o al de los laicos que son la mayoría de israelíes y quieren una solución del reconocimiento de dos Estados?). Además, en la falta de argumentos contextuales hay que resaltar la falta de conocimiento de todas las guerras que han antecedido a cada avance de territorio por parte de Israel y en desbalance para los palestinos. Es decir, desde la resolución 181 establecida por parte de la mismísima Organización de las Naciones Unidas en apego al derecho internacional, seis naciones árabes lejos de aceptar la resolución negaron su aceptación e iniciaron una ofensiva bélica contra un país creado desde la visión de David Ben Gurion y partidarios de un modelo de sionismo laico y de izquierda; y así pasaron guerras orquestadas desde nacionalismos dentro de las cúpulas gubernamentales en Egipto, Jordania, Líbano y Siria con el fin de legitimar su bandera nacionalista y panarabista que aún en su agenda fracasó y derivó en un peor porvenir del pueblo palestino.


Redes Sociales No Constructivas

Las redes sociales nuevamente se desbordaron con supuestos expertos en el conflicto, en la región, en derecho internacional y hasta en comparativas nulamente equiparables entre la separación de Arizona, California, Texas y Nuevo México de México, con el conflicto palestino israelí. El postear por postear nos genera un sesgo informativo que omite y evade cualquier intento de opinión contraria y que hasta pudiera informar de los esfuerzos de la sociedad civil de ambos lados y entrelazados para detener esta lamentable confrontación.

La coyuntura deja llevar al usuario de redes sociales en una simpleza de compartir lo que le es del momento y del trasfondo político que viven ambos lados derivado de una crisis política, en el que Israel no logra concretar una coalición de gobierno y una estabilidad parlamentaria metiendo hasta al partido “Lista Árabe Unida”(Raam) como pieza clave del tablero de ajedrez; y del lado palestino, unas elecciones reñidas y esperadas desde hace quince años en los que Hamas buscará a toda costa obtener un resultado de consolidación política por encima de Al Fatah, partido de Mahmoud Abbas y actual gobernante del Estado de Palestina o Autoridad Nacional Palestina, dependiendo del reconocimiento de cada país a nivel internacional.

Al final, el reconocimiento a nivel internacional o la solución no vendrá de alguien que promueva la polarización, el extremismo y la negación al diálogo. No vendrá tampoco de opinólogos, ni de “internacionalistas” y “personalidades” que no conozcan ni a un palestino, ni a un israelí y mucho menos a las organizaciones que promueven el diálogo. Y hablando de esas organizaciones, déjeme decirle estimada y estimado lector, que hoy en día siguen esperando que sus contenidos en redes sociales puedan ser replicados y generen mayor presión para no únicamente lograr un cese al fuego, ni una mediación momentánea o un status quo con latente peligro de vida para las y los involucrados, sino una paz y una convivencia entre ambos pueblos.

Gracias por su atención y espero su opinión en el espacio y redes de CabeceraMx o en las redes sociales de un servidor: @PabloQZepeda

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Periodista, resignado Atlista, enamorado de mi ciudad y de mi Estado. De L a V en punto de las 7am al aire @1070noticias http://bit.ly/oYJFU2