El Papa Francisco inició esta noche la misa de Nochebuena, una de las celebraciones litúrgicas más esperadas del año, ante miles de personas congregadas en la Basílica de San Pedro del Vaticano.
Poco antes de las 21:30 horas local (20:30 GMT), el líder católico ingresó en procesión precedido por obispos y cardenales, con vestimentas blancas que pertenecieron al Papa Pablo VI, incluida una sobria mitra y el báculo.
Mientras ingresaba la procesión, el coro entonó cantos navideños: “En la noche se elevó una luz allí arriba, todo el cielo se abre: hoy nace el señor. Una voz lo anuncia a los pastores aquí abajo: Acojan al niño que viene por nosotros”.
“En el gozo de los pastores, cada hombre verá, dónde late el corazón que busca amor. Es la fiesta de los pequeños y jamás terminará: Si te donas a él, él te tomará”, agregó la melodía.
Luego, tras la llegada del Papa Francisco al altar mayor, se pasó a la entonación del Kalenda, un canto que refiere los siglos que transcurrieron desde la creación del mundo hasta el nacimiento de Jesús, el salvador.
“Unos 21 siglos después que Abraham, nuestra padre en la fe, migró a la tierra de Ur de los Caldeos; cerca de mil años después de la unción real de David; en el año 752 de la fundación de Roma y en el año 40 del imperio de César Octaviano Augusto”, entonó un diácono.
“Mientras en toda la tierra reinaba la paz, Jesucristo, Dios eterno e hijo del eterno padre, queriendo santificar con su venida, concebido por obra del espíritu santo, transcurrido nueve meses, nació en Belén de Judea de la Virgen María”, añadió.
Entonces, después del anuncio de la Natividad “del señor según la carne”, fue develada una estatuilla de Jesús bebé y fue rociada con incienso. Así inició la celebración en la Basílica de San Pedro, que culminará con la adoración de ese niño Dios.
