El peso finalizó noviembre con una depreciación de 0.35 por ciento o 7.2 centavos, para cotizar alrededor de 20.41 pesos por dólar, al observar pocos cambios con respecto del cierre de octubre, mes en que cayó cerca de 8.66 por ciento o un peso y 62 centavos.
De acuerdo con Banco Base, en ese mes que recién terminó, el tipo de cambio enfrentó presiones al alza debido a que persistió la incertidumbre asociada a las políticas que implementará la nueva administración federal, lo cual se combinó con las dudas en el mercado financiero internacional sobre el futuro de la relación comercial entre Estados Unidos y China.
Durante las primeras sesiones de noviembre, el tipo de cambio alcanzó un mínimo de 19.5766 pesos por dólar, para subir a un máximo de 20.6343 pesos por unidad, nivel no visto desde junio en los días previos a las elecciones presidenciales.
Las presiones al alza se debieron principalmente a las propuestas legislativas de los partidos con mayoría en el Congreso mexicano.
El 8 de noviembre, el Partido Morena presentó en el Senado la iniciativa para eliminar varias comisiones bancarias, lo que para los bancos más grandes, tiene el potencial de reducir en al menos un tercio de sus ingresos.
Por su parte, el 20 de noviembre también se presentó la iniciativa para revisar los contratos de empresas del sector minero, lo cual tiene el potencial de limitar el crecimiento de esta industria.
Hacia el cierre del mes, el peso borró la mayor parte de sus pérdidas de noviembre, luego de que el mercado comenzó a especular que la Reserva Federal podría frenar el ritmo de incrementos a la tasa de interés durante 2019, ante el riesgo de una desaceleración económica.
La institución financiera explicó que durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, el peso mostró una depreciación acumulada de 57.4 por ciento o siete pesos y 44 centavos, al caer cada año a una tasa promedio de 8.4 puntos porcentuales.
El nivel mínimo del tipo de cambio se alcanzó el 9 de mayo de 2013, en su primer año de gobierno, cuando la paridad peso-dólar se ubicó en 11.9364 pesos por dólar, justo antes de que la Fed anunciara su intención de concluir su programa de compra de bonos, ocasionando un debilitamiento generalizado del dólar.
El nivel máximo del tipo de cambio, de 22.0385 pesos por dólar, se alcanzó el 11 de enero de 2017, en los días previos a la toma de protesta de Donald Trump como presidente de Estados Unidos. Este es también el tipo de cambio nominal más alto en registro.
Asimismo, Banco Base estimó que durante diciembre el tipo de cambio podría subir si se sigue deteriorando la relación entre China y Estados Unidos en materia comercial, o en caso de que se presenten eventos geopolíticos que eleven la aversión al riesgo en los mercados financieros globales.
El tipo de cambio también puede subir si la nueva administración federal en México da señales de querer implementar medidas de política no ortodoxas.
Ello, al tomar en cuenta la estacionalidad del tipo de cambio durante diciembre, la cual está influenciada por la disminución de la liquidez en el periodo, hacia el cierre del año el tipo de cambio podría ubicarse cerca de 20.85 pesos por dólar.
Sin embargo, el mercado seguirá de cerca la comunicación oficial de Andrés Manuel López Obrador al arranque de su sexenio.
Debido a que en octubre se registró una depreciación acelerada del peso, no se descarta que en diciembre se observe una corrección a la baja hacia el nivel de 19.60 pesos por dólar.
Lo anterior, si los primeros mensajes de López Obrador son conciliadores con los mercados, la publicación del presupuesto para 2019 es responsable y se anuncian medidas de política apegadas a la ortodoxia económica.
