La Fiscalía General de Justicia de Nuevo León informó que al realizar una inspección en el cuerpo de los dos menores que fallecieron en Escobedo, después de comer pollo en mal estado, se descartó alimento en el estómago, y solo se halló líquidos.
El Fiscal del Estado, Pedro Arce Jardón, dijo que la versión coincide con la declaración del padre de los pequeños al señalar que tuvieron diarrea y vómito posterior al consumo del producto en su vivienda en la colonia San Genaro.
Además, agregó, al inspeccionar los cuerpos de los niños de 3 y 5 años, descartaron que hubiera signos de maltrato o de violencia.
El encargado del despacho, indicó que están en espera de los resultados de química y patología para determinar legalmente la causa de la muerte de los menores.
«Estamos esperando el resultado del estudio que se hace sobre los alimentos y si presentaban alguna bacteria, así tomó una muestra del producto que se aseguró en el establecimiento para ver las condiciones que tenían».
«Es un poco tardado por el proceso mismo que lleva, aquí nos estamos coordinando con la Secretaría de Salud que nos están auxiliando en el proceso, sobre todo en el tema de los alimentos, yo espero a más tardar a principios de la próxima semana podamos tener los resultados científicos para poder establecer las condiciones y las causas (de muerte de los menores)».
El pasado 5 de mayo, un par de hermanos, de 5 y 3 años de edad, fallecieron al interior de su domicilio, por una presunta intoxicación provocada por comer pollo de un restaurante de Escobedo. Al padre de ellos, lo encontraron inconsciente en su hogar, por lo que fue trasladado a un hospital.
Con información de Milenio.