Por el caso de Giovanni López, hombre de Ixtlahuacán de los Membrillos que fue asesinado en 2020 a manos de policías municipales por presuntamente no portar cubrebocas, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dirigió ayer la recomendación 642021 al gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, y al alcalde del municipio, José Heriberto García Murillo. La instancia de defensoría determinó que el 4 de mayo de 2020, día en que Giovanni fue detenido, hubo diversas violaciones a los derechos humanos. Los agravios comenzaron desde la detención arbitraria de Giovani López, contra quien se hizo uso excesivo de la fuerza, ya que se le ocasionaron lesiones que derivaron en su posterior fallecimiento.