El derecho al aborto avanza y retrocede simultáneamente en América Latina, donde al mismo tiempo que se dan pasos significativos en la conquista de los derechos sexuales y reproductivos, como el reciente fallo de la Corte Constitucional de Colombia despenalizando la interrupción voluntaria del embarazo hasta las 24 semanas, persiste un obstruccionismo que en la práctica impide que las mujeres puedan ejercerlos a plenitud.
Colombia ha sido el último país de la región en sumarse a la «Ola Verde” que recorre con fuerza Latinoamérica, desde que en diciembre de 2020 Argentina aprobara la ley del aborto y posteriormente la Suprema Corte de Justicia de México, en septiembre de 2021, declarara inconstitucional la criminalización del aborto.