Estados Unidos aseguró este lunes que no tuvo nada que ver con el sabotaje a la planta de enriquecimiento de uranio iraní de Natanz, y confió en que ese incidente no afecte las negociaciones para salvar el acuerdo nuclear con Irán.
«Hemos visto informaciones sobre el incidente en la planta de enriquecimiento de Natanz. Estados Unidos no estuvo implicado de ninguna manera», dijo la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, en su rueda de prensa diaria.