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Por: Salvador Cosío Gaona

Muertes, negligencia e ineficacia en la lucha contra el dengue en Jalisco

Un asunto peculiar en esta crisis sanitaria es la nueva forma de intentar proteger a sus funcionarios por parte del gobernante partido Movimiento Ciudadano (PMC) ya que tras la revolcada que le pusieron en el Congreso al Secretario de Salud Fernando Petersen Aranguren, el capataz del PMC Diputado Salvador Caro logró que en vez de citarlo a comparecer fueren los diputados a visitar al Secretario de Salud, pero ni siquiera al facilitarle Caro Cabrera las cosas a Petersen Aranguren se libró el galeno de nueva andanada de justificadas críticas de los diputados que lo visitaron.

Por cierto muy mal volvió a verse el gobernador Enrique Alfaro Ramírez al volver a esconderse de los medios y en su vieja táctica de usar las redes para replicar, lanzó un largo video en actitud agresiva en el que de nuevo criticó a la sociedad y dijo que no hay negligencia de su gobierno, descalificando todo argumento que se ha vertido como crítica a las fallas de su gobierno al enfrentar esta severa crisis sanitaria por la propagación del dengue y además de escudarse en el cambio climático y en que el asunto es de orden nacional, se explaya arremetiendo contra los que llamó ‘sus adversarios’ refiriéndose a quienes señalan la ineficacia de loa funcionarios por haber sido negligentes prohijando la epidemia de dengue que aqueja a Jalisco. Ni los datos de la severa problemática, los elementos claros que están señalando las omisiones, descuidos, ineficacia , ahorros malentendidos y sobre todo el alto número de víctimas del dengue y los muertos, entre ellos además varios modestos servidores públicos del sector salud, hacen madurar a Alfaro, quien continúa con su actitud prepotente llamando enemigos a todos quienes le señalan inconsistencias en la acción gubernamental, y así el mandatario pierde el tiempo denostando a la sociedad en vez de buscar enderezar esfuerzos y amainar la grave situación epidémica provocada por el dengue tipo 2 que aqueja a Jalisco.

Y es que por omiso y negligente en la atención a la proliferación de casos de dengue, a través de la Diputada María Esther López Chacón la bancada en el Congreso de Jalisco del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) está exigiendo que renuncie a su cargo como Secretario de Salud en Jalisco el Doctor Fernando Petersen Aranguren y además de la dimisión del galeno han planteado se declare de inmediato la alerta por epidemia de dengue y se puedan así implementar con carácter de urgente las acciones tendientes a controlar lo que siendo claro es, al menos, una epidemia, al ya estar generalizándose a diversas zonas y segmentos sociales, puede ser incluso ya una pandemia que ha causado demasiado daño a la población, con muchos casos de severa afectación e incluso muertes; la parlamentaria señaló : «Al doctor Petersen mis respetos a su trayectoria, pero nos ha demostrado que en este caso no supo abordar el tema como era necesario».

A nombre de su grupo parlamentario en el Poder Legislativo, la diputada morenista rechazó el que sea por carencia de apoyo federal suficiente la falta de acciones preventivas que debieron haberse efectuado por las autoridades jaliscienses, toda vez que desde la fracción del partido Movimiento Ciudadano (PMC) el legislador Luis Munguía intentó fallidamente generar un esquema verbal en defensa de los funcionarios del gobierno emanado de su instituto político al afirmar que la falta de acciones oportunas fue debido a retraso en el flujo de presupuesto o de insumos provenientes del Gobierno Federal, argumentando además que la problemática del dengue se presenta a nivel nacional, siendo refutado sólidamente en cuanto a que los datos señalan a Jalisco como el estado más afectado solo abajo de Veracruz, habiéndosele señalado claramente las omisiones y falta de acción oportuna por parte del mecanismo institucional local de prevención de riesgos sanitarios.

Pero es fácilmente atribuible la negligencia de las autoridades estatales en cuanto al manejo del grave problema que está nuevamente viviendo Jalisco con el dengue, tal como ocurrió así hace aproximadamente 10 años y señalar que no se ha aprendido mucho de las infaustas experiencias previas. El tema es que se está respondiendo con acciones tardías, negligentes, haciendo apenas el aviso de prevención por la incidencia del dengue que debió emitir hace ya varios días, así como haber fumigado hace ya bastante tiempo y no apenas en esta época.

Es claro que el Comité de Vigilancia Epidemiológica de Jalisco aprobó emitir un muy tardío aviso de prevención por la incidencia de dengue en la entidad, aviso que no tiene ya mayor utilidad, y quizá debió ya hacerse generado la alerta sanitaria.

Cómo es ya conocido, según la numerología más reciente, que aunque polémica al considerarse puede estar amainada en forma mañosa, se señalan ya tres mil 405 casos en Jalisco, que colocan a nuestro estado en el segundo lugar nacional, tan sólo debajo de Veracruz, siendo lamentable que las solicitudes de atención médica por dengue en las clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en la zona metropolitana de Guadalajara y en las instalaciones de los Hospitales Civiles de Guadalajara se han disparado desde agosto debido al incremento de los afectados por dicho padecimiento.

Pero, ya ahora a través del propio titular de la Secretaría de Salud del Poder Ejecutivo jalisciense el Doctor Fernando Petersen Aranguren (quien por cierto tuvo que regresar abrupta y anticipadamente de sus vacaciones en el continente europeo), la dependencia ha insistido en regatear la magnitud del problema, pues aunque ha debido reconocer incremento en brote del dengue, insiste en aducir que no todos los casos que se presentan como tales son efectivamente dengue confirmable y se limita a expresar que según su opinión: “Son personas que están teniendo fiebre y malestar y ante esta alarma están acudiendo con prontitud a las unidades médicas”. Hay que advertir que el titular de la Secretaría de Salud sufre del menoscabo de su autoridad que además le resta capacidad de maniobra para operar, debido a que por el complejo esquema burocrático inventado por la actual administración a cargo del Gobernador Enrique Alfaro Ramírez debe acordar con la Coordinadora General Estratégica de las tareas gubernamentales para el desarrollo social Barbara Casillas quien a la vez acuerda con colaboradores del Jefe de Gabinete del Mandatario Hugo Luna, pero además debe lidiar con los conflictos que le genera la imbricada estructura de la dependencia a su cargo, especialmente con los problemas ocasionados por la falta de entendimiento con la directora del Organismo Público Descentralizado (OPD) Servicios de Salud Jalisco la Odontóloga María del Consuelo Róbles Sierra, que aunque en teoría le es subordinada, en la práctica la citada ex legisladora local se conduce de forma autónoma a la directriz del Secretario Petersen Aranguren.

Lo cierto es que las autoridades estatales no hacen lo necesario para abatir las consecuencias del dengue, ya que lo adecuado sería reconocer la problemática y procurar resolverla, pero Fernando Petersen sigue insistiendo en que hay capacidad en los laboratorios y están garantizadas las pruebas detección del dengue, sin admitir el que por el severo incremento de la enfermedad infecciosa ha crecido el número de las hospitalizaciones de personas afectadas por tal virus, y hay aseguró insuficiencia para respaldar a los pacientes.

Y es desde las oficinas centrales de la Secretaría de Salud, que parece haber mayor receptividad hacia la gravedad del problema y en un reconocimiento tácito a la severa afectación en Jalisco, el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece) ha anunciado que se pondrán en marcha tareas emergentes de capacitación y manejo de pacientes por parte de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para el personal de 12 entidades, entre ellas Jalisco.

Lo claro es que las autoridades sanitarias de Jalisco no reconocen la gravedad del incremento en brotes de dengue, lo único que si está reconociendo el Secretario de Salud de Jalisco es que se prevé un repunte del dengue en las próximas cuatro semanas más persiste en que solo es necesario por el momento el aviso y no es adecuado avanzar hacía la alerta sanitaria y aduce que basta con recomendaciones a las instituciones de Salud, médicos y población, e información para los directores de las áreas de Epidemiología. Eso no es suficiente.

Alfaro debe modificar su actitud y dejar de culpar a la sociedad de los asuntos en que resulta claro está fallando su gobierno, no es con gritos y amenazas cómo puede retomar el rumbo perdido. El gobernador debe además revisar cómo arreglar los problemas de coordinación que se presentan al seno de las áreas del sector salud pues es conocido el conflicto entre los grupos que encabezan por un lado el propio titular de la Secretaría Fernando Petersen y por el otro la directora del Órganismo Público Descentralizado (OPD) Servicios de Salud Jalisco, que es la odontóloga ex diputada local Consuelo Robles Sierra, quien en teoría es subordinada del Secretario más en realidad opera con la autonomía que le otorgan desde Palacio de Gobierno estatal y eso es parte fundamental de la ineficacia en el sector salud, afectando severamente a la sociedad.

@salvadorcosio1
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