La actriz Demi Moore está recordando su peor pesadilla, el día que un chico murió ahogado en su piscina durante una fiesta. Ahora, la familia del fallecido la acaba de demandar.
Hace dos veranos Steven Valle lo estaba pasando en grande en una fiesta celebrada en casa de Demi Moore pero, sin saber exactamente como, el joven de 21 años cayó a la piscina y murió ahogado.
La asistenta que la actriz tiene en su mansión de Beverly Hills era la anfitriona de la fiesta y, como había tanta gente, nadie vio que Steven cayó a la piscina sin saber nadar. Eso, sumado a un par de copas que se había tomado, dio lugar al fatal desenlace.
Cuando le descubrieron ya no había nada que hacer, había perdido la vida. Ahora el padre de Steven demanda a la actriz puesto que, según él, ella tiene la culpa de que su hijo muriera. En la demanda que ha presentado acusa a Demi de no señalizar la piscina ni tampoco la profundidad del agua de la misma.
También afirma que los 38 grados del agua fueron determinantes porque influyeron en la función cerebral de Steven hasta llevarle a la muerte aunque, evidentemente, el alcohol tuvo mucho que ver.
Moore aseguró sentirse en shock cuando ocurrieron los hechos y, por supuesto, dio el pésame a toda la familia del joven pero parece que eso no es suficiente para su padre. A mí me huele a oportunismo porque, ¿acaso tenía Demi que señalizar la piscina del interior de su hogar? ¿Creéis que el padre quiere sacarle dinero a la artista?
