Las vacaciones de verano en los escolares son un tiempo de cambio. Con la rutina relajada el aprendizaje informal reina.
Entoncces, si los padres de familia tienen pensado en que los hijos ingresen a un curso en este tiempo debe ser de acuerdo con el interés de los menores, consideraron especialistas de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
Adriana Nachieli Morales Ballinas y Josué Napoleón Huerta Hernández, académicos de la Facultad de Psicología de la UPAEP coincidieron, en que la prioridad es la opinión del niño respecto de gustos e intereses, para evitar estrés en el hijo.
Morales Ballinas dijo que el ser humano nunca deja de aprender y que, incluso, estudios cualitativos han comprobado con maestros de diferentes sistemas educativos que cuando los niños se mantienen ocupados en verano, su retorno al siguiente ciclo escolar es más eficiente y con mayor facilidad.
Resaltó que debido al ritmo de vida que se vive actualmente, se ha distraído la atención del hecho de que un niño, niña o joven es un ser en estado evolutivo formativo, que tiene sus propios deseos, intereses y necesidades propias.
La catedrática de la Facultad de Psicología de la UPAEP dijo que siempre existe la incógnita sobre lo que se debe o no hacer con los niños y jóvenes una vez que han salido de vacaciones y de cómo pueden aprovechar mejor las vacaciones de verano.
Morales Ballinas indicó, que se debe tomar en cuenta qué desarrollo físico se busca en los niños o jóvenes y relacionarlo a los hábitos que tenga la familia; lo mismo para la creatividad y la estimulación cognitiva.
Ante esto, la pregunta de dejar descansar o mandar a los hijos a un curso durante las presentes vacaciones de verano dependerá de cada familia y de sus necesidades, en donde si ambos padres trabajan lo recomendable es que si ingresen a uno, pero considerando la opinión de los menores.
Por su parte, Josué Napoleón Huerta Hernández, académico de la Facultad de Psicología, advirtió que es importante cuidar la salud mental de los niños y jóvenes, de que continúen preparándose en el verano.
Mencionó estos deben seguir aprendiendo cosas nuevas, con el objetivo de que desarrollen otras competencias y habilidades.
“Se debe tomar en cuenta el interés del niño, qué quiere aprender o qué desea hacer, tener presente que el organismo va a llegar en un momento dado a sentir cierto estrés, hasta provocar inquietud o ansiedad en el niño, lo que podrá reflejarse en su actitud”, dijo.
El especialista de la institución subrayó la necesidad de equilibrar las decisiones y buscar una estimulación adecuada para evitar el estrés o caer en depresión por no hacer nada en este tiempo de receso escolar.
Precisó que los padres de familia deben tener claras las expectativas que tienen sobre sus hijos y de cómo pueden aprovechar este periodo de vacaciones en la casa y fuera de ella.
