Con centenares de crímenes de odio sin resolver y una discriminación endémica y excluyente, la violencia contra la comunidad trans sacude a una América Latina con frágiles avances para este colectivo:según un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) la esperanza de vida de las mujeres trans en América Latina tan solo es de 35 años.
La «violencia, pobreza y exclusión» expone especialmente a las personas trans debido a la «desigualdad de género», mientras que otras relaciones de poder «reducen de manera alarmante la esperanza de vida promedio de mujeres trans a 35 años», indicó el organismo en un informe publicado en 2018.