La Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (PROEPA), clausuró una planta tratadora de aguas residuales en el municipio de Ayotlán, debido a que se detectaron escurrimientos fuera de las instalaciones, afectando a predios aledaños.
La situación se generó por las actividades de depósito de vinazas con agua de lluvia en la fosa auxiliar.
Asimismo se detectó que se realizaban descargas finales a un río sin demostrar su tratamiento previo o permiso para riego, generando un riesgo de contaminación al suelo, subsuelo y cuerpos de agua, con riesgos a la salud de la población, a los recursos naturales y los ecosistemas colindantes.
Por tal motivo y de acuerdo a la Ley Estatal del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, la PROEPA procedió a la clausura parcial temporal de la fosa auxiliar por existir un riesgo inminente de desequilibrio ecológico con daño o deterioro grave a los recursos naturales con repercusiones peligrosas para los ecosistemas sus componentes y la salud de la población.
La clausura estará vigente hasta que se realicen las acciones de urgente aplicación impuestas por la PROEPA, y sólo se permitirá el acceso a la fosa auxiliar para realizar remediación previo a presentar su cronograma de actividades ante la Secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (SEMADET), así como dar cumplimento a la totalidad de las condicionantes del dictamen emitido desde noviembre de 2016.