Un total de ocho personas fueron arrestadas hoy en Turín acusadas de haber desencadenado el pánico en la plaza San Carlo, de esa ciudad italiana el pasado 3 de junio, durante la final de la Liga de Campeones, informaron portavoces de la policía.
Dijeron que los detenidos rociaron de spray picante a la multitud para crear caos, pero en la desbandada una mujer murió aplastada y decenas de personas resultaron heridas.
Según las fuentes, el grupo usaba esa técnica en eventos públicos para poder robar.
Los ocho detenidos, algunos de ellos de nacionalidad extranjera, fueron identificados gracias a interceptaciones telefónicas hechas durante otra indagación.
En las “escuchas” telefónicas, algunos de los imputados hablaban de un collar de alto valor robado en la plaza de San Carlo el día de la final de la Liga de Campeones, cuando miles de personas estaban reunidas ahí para ver en maxipantallas el partido entre Real Madrid y Juventus.
Los acusados aprovecharon la concentración de personas para difundir el pánico, pero en la desbandada Erika Pioletti, de 38 años, perdió la vida, mientras la alcaldesa de Turín, Chiara Appendino, fue acusada por la falta de medidas de seguridad adecuadas.
Tras conocerse los arrestos, el fiscal general de la región de Piemonte, cuya capital es Turín, Francesco Saluzzo felicitó al jefe de la policía turinesa, Francesco Messina.
“Fue una investigación compleja, conducida en modo inteligente”, declaró.
