Una trabajadora de la sucursal Terraza Coapa de Churrerías El Moro en la Ciudad de México ha denunciado públicamente haber sido víctima de acoso laboral y violencia verbal por parte de sus superiores. En un video que se ha vuelto viral en redes sociales, la empleada, identificada como Karen, relata cómo fue presionada para firmar su renuncia el pasado 28 de febrero, en un ambiente que describió como hostigante y humillante.
Según el testimonio de Karen, la presión se ejerció por parte del abogado de la empresa, la representante de Recursos Humanos y un supervisor distrital. En el clip, se observa a la mujer siendo rodeada por estos individuos, quienes intentan obligarla a firmar su dimisión, mientras ella pide que la dejen en paz y evite el contacto físico.
“Ayer 28 de febrero de 2025 en la sucursal ‘Moro Terraza Coapa’, sufrí acoso laboral y violencia laboral. Me tuvieron 2 horas hostigándome y presionándome para que les firmara. Se burlaron y me humillaron ante mis compañeros de trabajo y los comensales”, narró Karen en su cuenta de Instagram. Además, compartió que le hicieron sentir que había dañado la imagen familiar de la empresa, un argumento que considera “hipócrita” a la luz de los eventos que vivió.
La denuncia ha generado un amplio debate sobre las condiciones laborales en el sector de servicios en México y la responsabilidad de las empresas para proporcionar un ambiente de trabajo libre de violencia. A raíz de esta situación, Churrerías El Moro ha iniciado una investigación interna para esclarecer los hechos y ha emitido un comunicado donde asegura estar comprometida con el respeto y la equidad en su entorno laboral.
“Actuaremos con responsabilidad y tomaremos las medidas necesarias, siempre en apego a la ley y a nuestro reglamento interno. Reafirmamos nuestro compromiso de mantener un ambiente de trabajo seguro, sano e incluyente”, se lee en el comunicado de la empresa.
Sin embargo, la controversia ha llevado a muchos usuarios en redes sociales a expresar su indignación, con comentarios que condenan las acciones de la empresa y prometen no volver a ser clientes. “Deplorable”, “No vuelvo a comprar ahí”, y “Eso es abuso”, son solo algunas de las reacciones que han surgido en respuesta a la situación.
El caso continúa en desarrollo, mientras la atención pública se centra en las prácticas laborales de Churrerías El Moro y la protección de los derechos de sus trabajadores.
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