Magistrada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Mónica Aralí Soto Fregoso, señaló que la denuncia de violencia política de género es la mejor arma para las mujeres y por ello hay que fomentarla porque tiene un mayor costo el callar.
Agregó que la violencia política es un cáncer que se tiene como sociedad en cuanto al tema del acceso de las mujeres al ejercicio pleno de sus derechos político electorales.
Por ello, consideró que se debe visibilizar para definirla y abordar las vías para resolver esta violencia agregada que cargan las mujeres, como lo es en el ámbito de la política, por el hecho de serlo.
Al participar en el Conversatorio Institucional “Violencia Política de Género en los Procesos Electorales de la Tercera Circunscripción”, a la cual pertenece Tabasco, expuso que la denuncia es la mejor arma para garantizar los derechos políticos de las candidatas violentadas durante los procesos electorales.
“La denuncia hay que fomentarla; hay muchos costos cuando una mujer decide denunciar una situación de violencia, pero creo que son más los costos de callar”, subrayó ante magistradas y consejeras electorales estatales de entidades del sur-sureste.
Invitó a las mujeres a denunciar y a los hombres a que ayuden a hacerlo en situaciones de violencia política hacia sus compañeras en los partidos políticos al considerar que allí es un foco rojo en este tema, al igual que en los municipios.
Las mujeres, añadió, tienen que aprender a identificar cuando existe violencia política de género y estar conscientes de que una contienda electoral no se trata de acabar con el adversario, sino de participar libremente en un ejercicio democrático.
Cuando se presenta un caso de este tipo, mencionó que el TEPJF tiene la obligación de dictaminar medidas de protección para quien la promueve, a fin de prevenir represalias en su contra, incluso en la etapa posterior si resulta ganadora en la elección de algún cargo de elección popular.
En el auditorio del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), consideró que Tabasco ha logrado avanzar y es modelo en paridad de género en cargos de elección tanto en número de legisladoras locales como en la integración de regidurías municipales.
“Tabasco logró posicionarse como una de las entidades federativas que despunta a nivel nacional por la participación que se logró en el Congreso del Estado, en los municipios que son el foco rojo para atender la participación de las mujeres”, puntualizó.
Por ello, estimó que las entidades federativas tienen un papel primordial en la construcción de la política nacional para avanzar y fortalecer una equidad en el mejoramiento de la sociedad.
