Por: Alejandro Toledo
Fue en 1982, cuando Rosario Ibarra de Piedra rompía barreras de género y se convertía en la primera mujer candidata a la presidencia de la república, hoy, 42 años después, parece inminente la participación con reales oportunidades de ganar para al menos una mujer en las elecciones concurrentes del 2024. Sí, 42 años después, podemos presenciar como esa lucha de Ibarra de Piedra alcanza su primer objetivo.
Digo esto porque en días pasados se le entregó la constancia de mayoría que acredita como “Responsable Para la Construcción del Frente Amplio por México” a Xóchitl Gálvez, y con esto, aunque en ley aún no son tiempos, se entiende que será ella quien encabece la candidatura de esta importante coalición de oposición en el país. Todo este proceso de selección de FAM, estuvo acompañado de múltiples polémicas y personajes de antaño en la política mexicana. Sin embargo, fue Xóchitl quien supo capitalizar los embates del presidente, pudo unificar lo que se creía imposible y ahora tiene el respaldo de los partidos “históricos” en México.
No cabe duda que será interesante la campaña de comunicación que pueda acompañar a la futura candidata, habrá que ver qué tan fuertes son las estructuras del Frente Amplio por México y, sobre todo, será importante analizar su plataforma para ver si el Frente es capaz de entender las dolencias de las y los mexicanos.
Y si al principio mencioné a la defensora de los derechos humanos, Rosario Ibarra de Piedra y sus candidaturas a la presidencia, no es solamente por Xóchitl Gálvez, sino porque el 6 de septiembre también MORENA decidió quién será la “corcholata” ganadora. Sin sorpresas, se cumplieron las encuestas que todo el tiempo ponían como favorita a Claudia Sheinbaum, no solo en “la interna” de su partido, también en competencia contra el FAM, resultando favorecida con alrededor de 17 puntos de ventaja. Aunque distintas casas encuestadoras dan como favorito a MORENA para llevarse “la grande” en 2024 con cualquiera de sus posibles candidaturas, parece que Claudia es con quien menos se pone en riesgo la continuidad de la 4T en Palacio Nacional.
Pese a todos los rumores macabros que giran en torno a la Comisión Nacional de Encuestas de MORENA, las peleas entre las corcholatas y los distintos señalamientos a actores relevantes de la 4T, siempre es interesante ver esta clase de ejercicios, la promoción de la participación política, las capacidades de los partidos, y por qué no, los chismes que trascendieron desde el día de la famosa encuesta.
De lo que estoy seguro es que, pase lo que pase, estamos hablando de un hecho que marcará un antes y un después. Ya que tenemos a dos mujeres rumbo a la contienda presidencial, la de la oposición, y la que coordinará los Comités de Defensa de la 4T y encabezar la candidatura presidencial.
Faltan decisiones por tomar, pero estamos cerca de tener a la primera presidenta de México.
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