La «operación especial» del ejército de Israel para liberar a cuatro rehenes en el centro de Gaza dejó al menos 210 muertos y más de 400 heridos, informó este sábado el gobierno de Hamás.
De acuerdo a Daniel Hagari, portavoz militar israelí, la operación tuvo lugar en el corazón de un barrio residencial de Nuseirat, donde Hamás había retenido a los rehenes en dos bloques de apartamentos. Las fuerzas israelíes fueron objeto de un intenso fuego durante el asalto y respondieron disparando «desde el aire y desde la calle».
Paramédicos y residentes de Gaza dijeron que el asalto mató a decenas de personas y dejó cadáveres destrozados de hombres, mujeres y niños esparcidos por un mercado y una mezquita.
Por su parte, la oficina de prensa del gobierno de Hamás anunció que al menos 210 personas murieron y más de 400 resultaron heridas.
Los liberados fueron una mujer -Noa Argamani, de 26 años- y tres hombres: Almog Meir Jan, de 22; Andrey Kozlov, de 27; y Shlomi Ziv, de 41. Todos ellos «secuestrados» en el festival de música electrónica Nova, durante el sangriento asalto del grupo terrorista Hamás en Israel el pasado 7 de octubre.
La ofensiva israelí como represalia se cobró hasta el momento la vida de al menos 36 mil 801 personas en Gaza, en su mayoría civiles, según el Ministerio de Salud del gobierno de Hamás en el territorio palestino.
Por su parte, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, asumió con «alivio» la liberación de los cuatro rehenes, a la vez que condenó la «masacre de civiles» palestinos bajo el fuego israelí durante la misión de rescate.
«Los informes procedentes de Gaza sobre otra masacre de civiles son espantosos. Condenamos esto en los términos más enérgicos. El baño de sangre debe terminar de inmediato», afirmó Borrell en un mensaje difundido a través de la red social X.
