Por: José Alfredo Ceja Rodríguez
Académico Universidad Panamericana.
@alfredocejar
Sinaloa fue uno de los estados que en las pasadas elecciones llamaron más la atención por el resultado con el que ganó Rubén Rocha, candidato de MORENA frente a Mario Zamora, candidato de la alianza Va Por México.
Ese proceso electoral fue uno en los que la alianza denunció la intromisión del crimen organizado, pero para entender el resultado podemos analizar los resultados en las últimas elecciones, casulamente el gobierno del estado de Sinaloa ha coincidido con el partido en el poder ejecutivo federal.
Rubén Rocha, quien está por entrar al Gobierno, fue candidato de MORENA, el gobernador saliente Quirino Ordaz fue candidato por el Partido Revolucionario Institucional en 2017, en la administración de Enrique Peña Nieto y su antecesor fue Mario López Valdez, quien en 2010, siendo Senador por el PRI y al no lograr la candidatura al gobierno del estado, fue postulado por una alianza compuesta por el PAN, el PRD y el entonces Partido Convergencia, logrando el triunfo sobre el candidato del PRI.
En su momento los ex gobernadores se han retirado de la vida pública o se refugiaron trabajando en el gobierno federal de su partido como Jesús Aguilar, quien en 2012 fue nombrado Sub Secretario de Agricultura en la administración de Enrique Peña Nieto, pero en esta ocasión llamó la atención el ofrecimiento del Presidente Andrés Manuel López Obrador a Quirino Ordaz para que se incorpore en unas semanas como embajador de México en España ¿Será pago por el buen resultado en su estado? ¿Será acuerdo con el crimen organizado o para protegerlo?
Esta oferta llama la atención porque Sinaloa fue un estado ejemplar para la operación electoral de MORENA, cuestionable por la participación del crimen organizado, pero fue un caso único en el que el gobierno del estado, la federación y el crimen organizado parece que se pusieron de acuerdo para que MORENA pudiera ganar, hoy podemos decir que tal vez Sinaloa sea el nuevo bastión de MORENA, tal vez sea un nuevo territorio con grandes aliados, no necesariamente gubernamentales.
Será interesante ver la reacción del Partido Revolucionario Institucional, ya que Quirino Ordaz en teoría es un gobernador priísta y al parecer no metió las manos por su candidato en la elección, por otro lado, es algo raro que Quirino durante los años de su gestión fue el gobernador mejor evaluado del país o por lo menos en algunos años, fue uno de los mejores y aun así, no logró que el PRI mantuviera el estado. Aquí el comportamiento del electorado pudiera ser digno de analizar, pero existió el factor del crimen organizado que el día de la elección levantó a personajes del Comité Directivo Estatal del PRI, una clara acción para que no pudieran operar y movilizar a los votantes de su partido, o por ejemplo en Los Mochis, en donde se dice que los jóvenes del PRI no pudieron estar en las casillas por la llegada de personas relacionadas con el crimen organizado.
Sinaloa desde hace muchos años se sabe que es la cuna del narcotráfico en México, hoy dividida en 2 grupos que buscan el control del Cártel de Sinaloa, pero habrá que ver, cuál de las 2 facciones apoyó al candidato de MORENA y tal vez en unos años veamos el resultado en el Estado y por qué no, en la federación.
También habrá que estar pendientes de la gestión de Quirino Ordaz en España, recordemos que el Ex Presidente Enrique Peña Nieto vive allá, y durante su gobierno tuvieron una buena relación, pero sobre todo hay que estar pendientes a la reacción del Partido Revolucionario Institucional y su líder Alejandro Moreno, porque también nos podemos preguntar si ¿habrá más gobernadores salientes que asuman algún cargo propuesto por el Presidente?, ¿será esa una forma en la que el Presidente busque dividir al PRI para lograr apoyos en la Cámara de Diputados? En fin, muchas son las interrogantes que nos podremos hacer a partir del cambio de gobierno en algunos estados del país y que sin duda, el más beneficiado es el Gobierno Federal.
