Se disputaron los cuartos de final o el llamado Final Four de la Leagues Cup de la CONCACAF donde la Selección Mexicana se enfrentaría a su acérrimo rival Estados Unidos en Las Vegas para el pase a la final de dicha competición.
Previo al encuentro, las selecciones de Panamá y Canadá harían lo propio y fueron los canadienses en colocarse en la fase final derrotando 2 por 0 a los del canal para ir llevando de forma «normal» el trámite de los partidos por jugarse.
Diego Martín Cocca seleccionador mexicano NO fue el culpable de la derrota pero sí tiene un serio problema para el cierre por el tercer lugar y la participación en la Copa Oro que se juega la siguiente semana. El TRI se vio carente en la ofensiva, sus hombres clave no aparecieron, la defensa se equivocó terriblemente en dos de los 3 goles recibidos, Guillermo Ochoa hizo lo que le alcanzó, pero con jugadores jóvenes como Montes y Arteaga que la frustración pudo más que su fútbol, liarse a golpes y ser expulsados hicieron aún peor la humillante derrota de México.
Si bien es cierto que Estados Unidos traía un cuadro muy competitivo, México siempre salía a darlo todo y hacer valer su mote del Gigante de la zona y al parecer ese apodo es parte de la historia, pues con esta es la cuarta derrota de forma consecutiva en partidos oficiales de La Selección Mexicana a manos de los Norteamericanos, que raya ya en el paternalismo gringo sobre nosotros.
Seguramente viene una tremenda sacudida en el vestidor y ajustes necesarios para que se le vea otra cara al TRI a días de arrancar el siguiente torneo oficial, hoy después de esta dolorosa derrota México tiene el compromiso aún más grande de campeonar en la Copa de Oro o de lo contrario podríamos ver por presiones y resultados un cambio en el timón antes de lo esperado.