En rueda de prensa celebrada este viernes, los regidores Fernando Garza del PAN, Sofía García Mosqueda del PRI y Tonatiuh Bravo Padilla de HAGAMOS, dieron a conocer su postura ante la iniciativa del primer edil, Pablo Lemus respecto a la restructuración de la deuda que guarda el municipio de Guadalajara.
Los Regidores de oposición señalaron la necesidad de renegociar la deuda y asÍ contar con un remanente de alrededor de 300 millones de pesos para inversión pública, ya que la crisis generada por el Covid-19, así como las repercusiones que en la actualidad se tienen por el conflicto armado en Europa, hacen necesario el contar con recursos para la reactivación económica y la recuperación de empleos de los Tapatíos.
Asimismo, refieren los regidores siete puntos indispensables que debe incluir el decreto de renegociación de la deuda, para aprobarla y son:
1. El período para la reestructura y/o refinanciamiento debe tener un límite máximo de 15 años y no 20 años como se ha propuesto hasta ahora.
2. No debe contratarse ningún servicio de asesoría externa, sino instruir a la Tesorería Municipal a que lo lleve a cabo.
3. Debe quedar explícito que el proceso competitivo que corresponde en el caso de refinanciamiento, es el de la licitación publica.
4. El proceso debe llevarse a cabo solo si se logra una propuesta de mejora en la tasa efectiva de interés, en los términos que señala la normatividad correspondiente.
5. Los instrumentos derivados y gastos conexos solo deben darse en caso justificado y siempre y cuando demuestren estar asociados a la mejor propuesta de baja interés.
6. La Comisión de Hacienda Pública y Patrimonio Municipal debe dar seguimiento y autorizar acciones derivadas del proceso.
7. Tal y como lo dispone la normatividad, debe ser explícito que los recursos liberados por la reestructura y/o refinanciamiento no deben ir a gasto corriente sino a inversión productiva pública.
El regidor Fernando Garza refirió que en este trabajo se tuvo siempre por delante los intereses de la ciudadanía y vigilar que el proceso de la restructuración de la deuda no le genere costos ocultos u onerosos al municipio.
“Nosotros no vamos a dar nuestro voto a favor si no se incluyen estas 7 condicionantes, que nos parece que harían del proceso justo para Guadalajara”, puntualizó por su parte el regidor Tonatiuh Bravo.
El Ayuntamiento busca reestructurar o refinanciar la deuda pública que es de más de 1,400 millones de pesos, y que se deriva de dos créditos: $846 mdp con Bancomer; y $555 mdp con el Banco Mercantil del Norte.