El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, explicó este jueves que se opone a «prohibir» la venta de comida chatarra en el país después de que el suroriental estado de Oaxaca limitara la comercialización de estos alimentos a menores de edad.
«No puedo tener injerencia en lo que digan los estados, pero mi opinión va en el sentido de que se oriente no caigamos en prohibiciones», expresó el mandatario del izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en conferencia de prensa.