El mural del artista español Okuda San Miguel en Quito, objeto de polémica desde su inauguración por integrar un Pikachu, fue vandalizado por un hombre que lanzó bolsas de pintura roja y blanca a la obra elaborada para rendir homenaje a las mujeres indígenas bordadoras de la comuna quiteña de Llano Grande.
La agresión, trascendida este martes, fue publicada por su mismo protagonista en la red social Tik Tok, en un vídeo corto donde, tras vandalizar la obra, lanzó una serie de arengas como «queda bloqueado este lugar de oscuridad, nuestros ancestros se respetan, y voy (a) por ti España, la liberación, porque no somos burla…».