La zona hotelera de Cancún, polo turístico por excelencia de México, no sucumbió a los estragos del huracán Delta, que impactó este miércoles la Península de Yucatán.
Tras la furiosa tempestad vino la calma y ya por la tarde de este día habitantes y turistas paseaban por las calles de la concurrida zona, observando los daños menores, como árboles caídos, que ha dejado Delta a su paso.