La pugna política por la sucesión del presidente Andrés Manuel López Obrador complicará a partir de este jueves la gestión del Gobierno mexicano al adelantarse dos años la batalla por convertirse en el líder del partido en el poder.
En la política mexicana esta pugna quedaba tradicionalmente soterrada y solo ya en el último año del sexenio se desvelaba o destapaba el sucesor, lo que disminuía a partir de ese momento el poder y capacidad de acción del presidente.